El Hospital Joan XXIII estrena nueva UCI con doce boxs equipados con la última tecnología
La unidad forma parte del nuevo parque sanitario que se está construyendo y ha costado 5,8 MEUR
El Hospital Joan XXIII de Tarragona ha presentado este jueves la nueva Unidad de Cuidados Intensivos (UCI). El espacio forma parte del nuevo Parque Sanitari Joan XXIII que se está construyendo, se encuentra en el edificio C y es la primera unidad del Servicio de Medicina Intensiva (SMI) del nuevo hospital. Cuenta con doce boxs e incorpora dispositivos médicos, de tratamiento y monitorización de última generación.
Ha costado 5,8 MEUR y es la primera fase de la remodelación del servicio de UCI, que se ejecutará en dos fases más, según ha explicado el conseller de Salut, Josep Maria Argimon. Durante la próxima semana y la siguiente empezarán a llegar los pacientes.
Argimon ha concretado que el nuevo servicio es «un paso del nuevo hospital». La próxima fase contempla convertir las doce camas de la UCI actual en doce camas de última tecnología como las recién estrenadas. «En 2024 tendremos 34 camas de UCI, 24 de ellas de alta tecnología», ha dicho el conseller. Por último, en 2025 las 34 plazas serán «de primer nivel mundial», ha manifestado. También se adecuará la zona para familias y despachos.
Maria Bodí, jefe del servicio de UCI del Hospital Juan XXIII se ha felicitado por tener una unidad «que tanto pacientes como profesionales merecían». «Está pensada para los próximos quince o veinte años», ha avanzado, y permitirá mejorar la «calidad de la atención». «Hemos trabajado mucho para que sea más humana y la estructura se adapte a todos los planes que el servicio tenía como línea estratégica, que es cuidar y hacer más cómoda la atención a los pacientes y familias», ha indicado Bodí.
Entre los widgets tecnológicos que incorpora hay sistemas para monitorizar a los pacientes desde fuera del box para garantizar su aislamiento en caso de enfermedad infecciosa, nuevas grúas móviles para mejorar la movilidad y traslados, una gestión más eficiente e inteligente de la iluminación y la posibilidad de hacer opacos los cristales para tener mayor privacidad. También habrá la opción de realizar pruebas de diálisis en todos los boxes, puertas automáticas estancas, puntos de trabajo frente al box y torres húmedas y secas, entre otros. Según ha indicado Salut, el diseño tecnológico aporta una Smart UCI donde todos los equipos con centrales propias enviarán alarmas a la aplicación centralizada, lo que facilitará la toma de decisiones con el análisis de datos en tiempo real y la utilización de la inteligencia artificial como herramienta de diagnóstico.
Además, se han instalado unos sensores en toda la unidad que se activan luminosamente cuando el ruido en la UCI supera los 70 decibelios, con el objetivo de velar por el silencio y el descanso de los pacientes. «Hemos visitado muchas UCI y hemos juntado lo mejor que hemos visto y lo hemos adaptado a nuestras prioridades», ha valorado la jefa del servicio.