Sociedad
La pastelería más antigua de Tarragona baja la persiana por jubilación
El cierre definitivo de la Pastisseria Palau tendrá lugar el 21 de agosto
La Pastisseria Palau de Tarragona bajará por última vez la persiana el próximo domingo 21 de agosto. El motivo es la jubilación de su actual propietario, Josep Roquet-Jalmar Palau. El negocio histórico del centro de Tarragona se ubica en el número 22 de la calle Unió.
La Pastisseria Palau ha sido un negocio de tres generaciones familiares. Fue fundado en 1928 por Antonio Palau Travé, abuelo del actual propietario. Con su muerte en 1945, pasó a manos de su mujer, Josefa Maria Solé Ciurana. Una de sus tres hijas, Maria Palau Solé, es quien heredó la pastelería junto con su marido, Josep Roquet-Jalmar Ensesa, quien era pastelero. En esta segunda generación, la Palau amplió horizontes y abrió dos tiendas más. En el número 3 de la calle de Maria Cristina se estrenó una segunda tienda, mientras que en el número 6 de la avenida de Prat de la Riba se inauguró la recordada Minerva, que ofrecía servicios de pastelería y charcutería. Ambas tiendas cerraron años más tarde. Con la muerte prematura de Josep Roquet-Jalmar Ensesa en 1981, dos de sus hijos, Antonio y Josep Roquet-Jalmar Palau, pasaron al frente del negocio. El segundo es quien ha liderado la Pastelería Palau hasta este 2022.