Pau Ricomà reivindica una «realidad metropolitana» para Tarragona

El alcalde de Tarragona, Pau Ricomà, reivindicó ayer «un área metropolitana para Tarragona» en su conferencia de ciudad, titulada Avancem cap a una Tarragona inclusiva, sostenible i cohesionada. Ricomà anunció, con énfasis, que Tarragona «está geográficamente imbricada en un conjunto de poblaciones que configuran una realidad metropolitana indiscutible». Y reclamó para esta área «aspirar a ser una realidad administrativa. Tarragona ejerce de capital, lo es desde el punto de vista demográfico, económico e histórico». No se olvidó tampoco de las otras poblaciones, que «ostentan el liderazgo a nivel de todo el país en campos como el agroalimentario, el industrial, el logístico y el turístico». Ricomà explicó también que «si el Campde Tarragona conforma un área metropolitana es porque sus ciudadanos han querido que sea así. En un mundo interconectado, un mundo en red, nuestra complementariedad se convierte en una gran oportunidad para ser un nodo que brille lo suficiente en un entorno claramente competitivo y para tener unos servicios especializados, sanitarios, educativos y sociales, propios de la ciudad extensa que en realidad somos, de cerca de cuatrocientos mil habitantes».

Entre los servicios que mencionaba, el alcalde situó «una de las mejores universidades jóvenes del Estado, la URV, uno de los principales puertos y un aeropuerto que tenemos que hacer entre todos que aumente su papel en el sistema aeroportuario», para hacer acto seguido un llamamiento a la expansión: «A veces tengo la sensación que tenemos un país pequeño que además de pequeño parece que aspire a estar embutido. El Campde Tarragona, con Tarragona al frente, tiene que ser la punta de lanza del reequilibrio territorial de Cataluña», dijo.

Para estructurar todo este conjunto, Ricomà se refirió a los trenes, quejándose de que «actualmente la utilización del transporte público es bastante baja en el Campde Tarragona, inferior al 18%, con una huella de carbono que tenemos que reducir sensiblemente». Para poner un ejemplo de lo que es necesario, explicó que «se está trabajando en la propuesta del TramCamp que enlace Tarragona y Vila-seca, para seguir hacia Reus o en dirección a Salou y Cambrils, con un trazado que vaya hasta la plaza Imperial Tàrraco, entrando a la Canonja, Bonavista, Campclar y Torreforta. Situando los barrios de Ponent en el centro de la movilidad en el Campde Tarragona y facilitando la llegada en tranvía desde el centro de Tarragona a la nueva estación de alta velocidad en Vila-seca, en el sur del aeropuerto. Podremos ir a buscar el AVE en tranvía. Esta sería la primera fase del tranvía que más adelante tendría que enlazar los principales puntos generadores de movilidad como el hospital Joan XXIII, los barrios del Norte de Tarragona y los de Llevant».

Sin embargo, Ricomà no se ahorró críticas a la situación recibida, ya que calificó «de auténtica muestra de ineficiencia» el funcionamiento del nudo ferroviario de Tarragona, poniendo como ejemplo que las mercancías pasen por el centro de la ciudad mientras los viajeros hayan de ir a buscar los trenes fuera.

No obstante, considerando todo el conjunto de infraestructuras, el alcalde citó 18 compromesas en este mandato para las diversas administraciones: inversiones en la Mancomunidad de Residuos, el nuevo Hospital Joan XXIII, el FòrumJudicial, el Centro Penitenciario Abierto, la Ciudad del Repòside Vacances, el Fòrumde la Colònia, la Necrópolis, la renaturalización de espacios con valor paisajístico, la recogida selectiva, la informatización de la administración municipal, los buses de hidrogeno, el estudio de vibraciones del tren al paso por el Anfiteatro, el traspaso de carreteras del Estado, el carril bici de Llevant, la ampliación del puente del Francolí, las pantallas acústicas del mismo río, Cal'Agapito y el aumento de la seguridad en la carretera de El Catllar.

Ricomà remarcó que el importe sumado de todas estas obras representaba más de 350 millones de euros públicos de inversión, que se ejecutarán durante el próximo mandato.

Mensajería móvil

Ricomà no olvidó citar una de las crisis con la que se ha tenido que enfrentar su administración, que fue el accidente de IQOXE y la situación que ha creado en los barrios de Ponent. «Como alcalde de Tarragona exijo al Estado que de una vez por todas aplique el sistema de aviso por mensajería mòvil, dando cumplimiento a una directiva europea que obligaba a los estados miembros a aplicar esta tecnología con fecha de límite de hoy, el 21 de junio, dijo con énfasis».

Ricomà concluyó refiriéndose a su visión del futuro: «Me imagino un futuro esplendoroso. No el de los grandes acontecimientos efímeros ni el de las grandes obras faraónicas. Me imagino una ciudad donde todo tenga sentido y donde todo el mundo cuente. Soy ambicioso, no de éxitos ni reconocimientos personales. Soy ambicioso en que con la suma de muchos esfuerzos e ilusiones Tarragona ocurra la ciudad con la mejor calidad de vida del Mediterráneo», dijo.