«La melancolía de las habaneras gusta mucho»

— ¿Quién es Quimet el Romesquet ?

— Es un personaje que he creado para la celebración de los 30 años de Habaneras en el Port. Desde Port Ciutat se ponen en contacto conmigo porque quieren celebrarlo de manera especial, y tienen la brillante idea de aprovechar las salidas con la Golondrina para explicar qué es la habanera. Me lo piden a mí y decido coger el nombre de Quimetpor mi padre, que también era músico, y el de Romesquetpor mi madre, porque|aunque yo soy nacido en la plaza de la Font, ella tenía parientes en el Serrallo y bajábamos a menudo. Y, además, hacía un romesco espectacular.

— ¿Yqué haceQuimet el Romesquet a bordo de la barca?

— Pues, además de cantar, explico muchas historias. Por ejemplo, hago referencia a una de las primeras habaneras que tenemos documentadas, que se llamaTú , y que habla de Cuba. Resulta que, cuando yo era pequeño, mi padre me la cantaba con una letra que hablaba de Tarragona, y decía Tecla. Yo quiero suponer que algún pescador del Serrallo debió ir a la guerra de Cuba, conoció a una mulata espectacular de nombre difícil, y le debió cambiar el nombre por el de Tecla.

— Como Xavier Martin¿cuando arranca su relación con el mundo de la habanera?

— Hace muchos años, en la década de los 70, cuando el género vuelve a reavivar y se hace la habanera en catalán. Siempre me había gustado y tenía interés al seguirla. Sin embargo, la parte más activa me llega hace ocho años, cuando entro a formar parte de un grupo del territorio, Sopa de peix. Con ellos he actuado por toda Catalunya y también por Levante, muy contento, a gusto, y siempre aprendiendo.

— ¿Cuál es su habanera preferida?

— Pues una que, precisamente, canto a bordo, y que se llamaUn cantd'amor. Es de Carles Casanovas y trata un tema de los que te tocan mucho, un poco comoPenélope de Serrat: el de una mujer a quien el mar le ha cogido al marido. Después, hay otra que también me gusta muchísimo, y que la canto con mi hija Laura. Se llama Vestida de nit. Esta habanera la hizo famosa Sílvia Pérez Cruz, y Laura tiene una voz bastante parecida. Después, con este tipo de música pasa que no es suficiente de cantarla o tener una buena técnica, sino que hay que comunicar. Laura y yo intentamos que sea así, y que la habanera pase a ser un nexo de unión con las personas que nos escuchan. Y esta canción tiene alguna cosa que hace que eso pase.

— Precisamente las mujeres empiezan a tener presencia en el mundo de la habanera, un género tradicionalmente masculino.

— Sí, y como siempre pasa con todo, hay puristas que no están de acuerdo. Yo lo encuentro bien, hay grupos, como Les anxovetes, que lo hacen muy bien. Se trata de abrir nuevos mercados y experimentar con estas voces.

— ¿Por qué cree que las habaneras, a pesar del paso de los años, todavía gustan tanto?

— Porque tocan la fibra, explican historias tristes de amor, de la mulata que se ha quedado en Cuba, del palmeral... Están impregnadas de melancolía. Musicalmente, tienen un vaivén, un toque cadencioso que se mezcla con la dulzura de la melaza y el roncito .