Los vecinos de la calle Eivissa de Tarragona denuncian que tocan los árboles desde los balcones

Conchita es una vecina de 87 años de la calle Eivissa. Desde su balcón, en un primer piso, asegura que sería capaz de tocar las ramas de los árboles si la edad no fuera un impedimento, ya que las ramas a lo largo de la vía han crecido tanto que son una molestia para las viviendas. Advierte, sin embargo, que ya hace tiempo que la situación es selvática en los alféizares de las ventanas de los primeros pisos: señala que la vegetación no se ha podado en todo el año 2022. No obstante, esta no es la única reclamación que hay en el área. Los vecinos detallan que, en la zona de las Cent Escales, la acera está llena de hierba, y no sólo enla cepa de los árboles, sino lo que surge entre las juntas de las baldosas. El elevado volumen de gente que pasea por el barrio durante todo el día hace que se tema que un cigarrillo, una cerilla o, incluso, las altas temperaturas puedan provocar un incendio. Conchita explica que contactó con el consistorio alertando del peligro y que la respuesta fue que no se preocupara porque «nadie tirará una cerilla».