El hermano de la víctima del tiroteo de Torreforta no se explica los motivos de la agresión

El hermano de la víctima del tiroteo del miércoles por la noche en Torreforta, Abou Bakr Sahli, no se explica los motivos de la agresión que sufrió en manos de unos desconocidos en aquellas circunstancias. Shali está estos días en el hospital Joan XXIII, haciendo compañía a su hermano Salah Edinn Shali, gravemente herido, ya que según explica «los médicos están tratando de salvarle la mano», muy afectada por los tiros que realizaron los agresores. Los hechos que sufrieron los dos hermanos y su disposición a hablar contrastan con el silencio que se ha extendido por la zona del tiroteo, donde nadie parece dispuesto a detallar una versión del acontecimiento más allá de la protesta por la falta de seguridad que se vive últimamente en la zona de Ponent.

Según Abou Bakr Sahli, la familia es propietaria de un bar en la calle Francolí, en una placita cerca del puente sobre la carretera T-11, que comunica esta zona con la Granja. Allí, en torno a las 10 de la noche, un grupo de personas desconocidas, tres o cuatro, iniciaron una discusión con Salah Edinn.

Abou Bakr, que vive cerca, bajó a ver qué pasaba y, en medio de la disputa, uno de los del grupo sacó del coche una escopeta «de caza», indica el testigo, «aunque yo no entiendo de armas», dice, y abrió fuego contra el hermano, que cayó al suelo. Acto seguido, los agresores subieron a un coche y huyeron del lugar de los hechos.

Abú Bakr se quedó con su hermano Shalaa Edinn, leacompañó al hospital y prestó declaración ante los Mossos d'Esquadra, que se presentaron en el lugar de los hechos acompañados de las unidades sanitarias avisados por las llamadas de los vecinos.

Lugar tranquilo

El hermano muestra su extrañeza ante los hechos, explicando que «yo hace veintisiete años que vivo en España y nunca había visto nada parecido. Tampoco nunca he pisado un juzgado. Este siempre había sido un lugar muy tranquilo». El testigo, de origen marroquí, indica que los agresores lo eran también.

Preguntado por los motivos que dieron origen a la pelea, insiste en que se trata de una simple discusión, como ahora «si tú has dicho esto o tú has dicho aquello». La finalidad de todo sería atemorizar al barrio, según Abu Bakr.

De momento, nadie de la familia ha querido volver a abrir el bar, «porque a nosotros sí que nos ha dado miedo esta agresión que hemos sufrido». Por esta razón no critica la falta de testigos en el barrio, aunque en el momento de la agresión diversa gente publicó comentarios sobre la seguridad de la zona como si hubieran presenciado los hechos o comentando circunstancias. «Los vecinos», dice, Abu Backr, «también tienen miedo».

Al mismo tiempo, el hermano de la víctima también explica que lo que quiere, con la acción de la Justicia, es que«con eso se dé ejemplo, y que los culpables vayan a la prisión». Según Abú Bakr, muchos de los miembros de la familia Shali son vecinos de Tarragona desde hace tiempo, y algunos tienen la nacionalidad española. Siempre se han dedicado a trabajar, y no se explican cómo ahora han sido víctimas de este ataque que consideran injustificado y fuera de lugar.