Sostenibilidad
Ematsa impulsa la mejora de los recursos propios para abastecerse de agua
Ha impulsado la construcción y rehabilitación de captaciones en los pozos de Renau y Soler Bas y ha puesto en marcha la construcción de dos plantas de tratamiento
Ematsa impulsa la mejora de los recursos propios para abastecerse de agua
La Empresa Municipal Mixta d'Aigües de Tarragona está llevando a cabo una serie de acciones para mejorar los recursos propios que aseguren el suministro de agua de calidad. Según el presidente de la compañía, Jordi Fortuny, se trata «de iniciativas orientadas a garantizar la disponibilidad del recursos a través de las captaciones propias de la compañía y hacer un uso sostenible y eficiente».
A raíz del episodio de sequía de Cataluña, Ematsa se ha dotado de un estudio de los acuíferos del entorno para conocer los volúmenes disponibles y extraíbles de manera sostenible. Con esta información ha impulsado la construcción y rehabilitación de captaciones en los pozos de Renau y Soler Bas y ha puesto en marcha el proyecto de construcción de dos plantas de tratamiento para mejorar la calidad del agua. Además, está iniciando un proyecto de protección de la Mina de l'Arquebisbe y de mejora de su eficiencia hidráulica.
Junto con las acciones en captaciones, también se está elaborando un plan de infraestructuras en alta para establecer la máxima interconexión posible entre los puntos de extracción y las redes de suministro que permita la rápida circulación de agua para abastecer la población en casos de emergencia.
Apuesta por aumentar los recursos propios
Ematsa ha apostado en los últimos años por diversificar, mejorar y aumentar los recursos propios y, de esta manera, poder garantizar el suministro de agua.
Fortuny explica que «una dependencia total del CAT supone un riesgo, tanto operativo como económico». En este sentido, Ematsa ha mantenido congeladas las tarifas durante 2021 y 2022, periodo durante el cual el CAT ha incrementado el precio, hasta el momento, un 26%.
La compañía de aguas sigue su hoja de ruta para los diez próximos años, el VÍA 2030, que fija las líneas de trabajo para asegurar el servicio esencial con eficacia y eficiencia y preservando el entorno. Entre las acciones previstas, se fijan estas actuaciones encaminadas a mejorar y garantizar la sostenibilidad de los recursos propios.