Joan Rom, el espigador del paisaje
Se ha inaugurado en el MAMT 'El lloc', la primera exposición individual a la ciudad de Tarragona del artista residente en Castellvell del Camp
El sitio entendido como un espacio geográfico, pero también como aquel espacio propio que todos nos vamos construyendo, aunque nunca sea definitivo del todo.
Esta es la idea sobre la cual se fundamenta la exposición que Joan Rom inauguraba el pasado viernes en el Museo de Arte Moderno de la Diputación de Tarragona (MAMT).
«Soy una especie de espigador, todo el material que utilizo son piezas que recolecto en rieras, playas, vertedores...», explicaba Ron en la inauguración deEl lloc, su primera exposición individual a la ciudad después de un largo periodo sin exponer ni, casi, producir.
Joan Rom (Barcelona, 1954) vive y trabaja en Castellvell del Camp. Desde 1983 hasta 1999 tuvo el estudio en Mont-roig, momento en que decidió hacer un parónde cerca de dos décadas, durante el cual puso en pausa su producción y también la actividad expositiva.
Ahora, Rom vuelve con una exposición que concentra su actividad artística de los dos últimos años. Se trata de una selección de obras escultóricas, collages y fotografías hechas a partir de objetos encontrados, de elementos del paisaje –delllocdel artista– que Rom ha seleccionado para darles una nueva vida: «La idea es recuperar y volver a poner en circulación cosas que han estado en uso y ahora son restos», explica. Este planteamiento, recurrente en su obra ya desde los años 80, se manifiesta ahora en piezas que funcionan como relieves de pared, dibujos a gran escala que reaniman la belleza a fragmentos y objetos abandonados. «Los recojo, los selecciono y les hago una intervención muy pequeña, pero son pequeños gestos cargados de intención», detalla Rom.
EnEl llocdominan los elementos de carácter tectónico: guijarros y material de derribo que Rom ha seleccionado y organizado cuidadosamente a partir de sus cualidades formales, su peso, dimensiones y cromatismo. Con ellas, Rom configura piezas de apariencia sencilla que, a pesar de haber formado parte de un paisaje, no nos trasladan en un sitio geográfico concreto.
Las nueve piezas que conforman la muestra están distribuidas por varios espacios del MAMT, en una especie de fragmentación paralela a la de los materiales usados. El grueso está en la sala de exposiciones temporales, pero el visitante también se puede encontrar parte de la obra en la Sala 0, que es la puerta de entrada a la exposición permanente del museo, y en elespacio de La Capella, situado en la segunda planta.
«El Museo ha mostrado mucho interés por la exposición y estoy encantado de inaugurar El lloc», aseguraba Rom el viernes pasado. El artista plástico estuvo acompañado de la presidenta de la Diputación, Noemí Llauradó, el director del MAMT, Manel Margalef, y de Marc Navarro, comisario de la muestra.
El llocse puede visitar hasta el 27 de noviembre. La entrada es gratuita.