Tormenta sobre Tarragona
Aragonès visita Tarragona para empezar la valoración de daños por el aguacero
El presidente de la Generalitat ha trasladado su apoyo a los vecinos afectados y ha pedido prudencia ante la posibilidad de nuevas lluvias
La Generalitat y el Ayuntamiento de Tarragona han empezado la valoración de los daños causados por el aguacero que cayó este viernes en el litoral tarraconense y que dejó precipitaciones superiores a los 100 l/m2. El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, ha visitado algunos de los puntos más afectados acompañado del alcalde de Tarragona, Pau Ricomà. Este hecho obligó a desalojar a los vecinos de un edificio muy próximo y que ya han podido volver a sus domicilios. El barrio del Serrallo, el del Vall de l'Arrabassada y el del Port recuperan la normalidad mientras los residentes acaban de sacar agua y barro acumulados en los bajos.
Aragonès ha trasladado su apoyo a los vecinos afectados y ha pedido prudencia ante la posibilidad de nuevas lluvias esta tarde. Acompañado por el alcalde Ricomà y la delegada del gobierno del Generalitat en Tarragona, Teresa Pallarès, Aragonès ha destacado «la rápida actuación de los equipos de emergencia y del ayuntamiento».
También ha subrayado el hecho de que no se hayan producido daños personales a pesar de la intensidad de la lluvia, más de 130 litros de agua por metro cuadrado, 49 de los cuales caídos en menos de 30 minutos, el récord de precipitación en los últimos 13 años en la capital tarraconense, que está de fiesta mayor. Aragonès ha mostrado su total «apoyo a los vecinos afectados por estas inundaciones y chubascos, de extrema intensidad, que han causado numerosos daños materiales».
El presidente ha visitado, entre otros sitios, la Escola Miracle, uno de los muros de la cual cayó, aunque ha explicado que las clases se podrán reprender con normalidad el lunes que viene, sólo con un patio afectado que tardará unos días a ser reparado «de la manera más segura». «Lo más importante es que no hay lesiones personales», ha destacado al presidente catalán, que ha reiterado el esfuerzo y rápida reacción «de todos los equipos de emergencia, que han estado a punto para responder en tiempos difíciles como estos», así como el trabajo conjunto con el Ayuntamiento.
En declaraciones a los periodistas, Aragonès ha señalado que ahora están evaluando los posibles daños en algunos edificios privados, aunque ya no quedan vecinos desalojados preventivamente. El presidente catalán también ha pedido «prudencia» porque los servicios meteorológicos predicen que esta tarde las lluvias volverán en diferentes áreas de Cataluña, lo que puede afectar a la costa y el prelitoral de Tarragona, aunque el pronóstico es que no será una lluvia tan intensa como la de ayer. «No se espera que sea de la misma intensidad de ayer, pero estamos obligados a ser precavidos», ha dicho Aragonés.
Por su parte, el alcalde de Tarragona ha agradecido la tarea de todos los profesionales que durante la jornada de viernes trabajaron para minimizar los efectos de la tromba de agua y recuperar las zonas afectadas. Con todo,Ricomàha apuntado que desde el consistorio pedirán «ayuda a las instituciones superiores» para resolver los problemas y que los vecinos afectados sean compensados por los efectos del temporal. A la vez ha reclamado «inversiones» a la Agencia Catalana del Agua para resolver deficiencias en la canalización de barrancos que hacen que los efectos de las lluvias se intensifiquen en puntos como el barrio del Port, elSerralloo el Vall de l'Arrabassada.