Movilidad
El Ayuntamiento de Tarragona ofrecerá un servicio de pedibús: rutas seguras a las escuelas
Hasta cuatro centros educativos formarán parte de la segunda fase del proyecto de movilidad infantil
El Instituto Municipal de Educación de Tarragona ha sacado a licitación el proyecto de diseño y acompañamiento en la implantación del bus a pie, también conocido como pedibús, que estará en vigor durante la totalidad del curso 2022-23, hasta finales del mes de junio.
Se trata de un servicio mediante el cual un adulto acompañará a un grupo de niños que se desplazarán a pie hacia la escuela por un recorrido seguro previamente establecido, con paradas señalizadas a lo largo del trayecto a fin de que más alumnos puedan adherirse al grupo. Los principales objetivos de este proyecto son fomentar la movilidad infantil sostenible e impulsar los desplazamientos a pie hacia la escuela, así como favorecer la socialización de los estudiantes que participen y aumentar la visibilidad y la seguridad de los niños y niñas como peatones, con el fin de concienciar de que el espacio urbano no es de uso exclusivo para los coches.
El consejero de Educación, Manel Castaño, también destaca el conocimiento del entorno próximo al centro educativo como uno de los pilares fundamentales de la iniciativa. «Están acostumbrados a ir en coche o en autobús. Bajan al lado de la escuela y entran. Aquí acaba su relación con la ciudad», señala Castaño.
Esta es la segunda fase del proyecto que inició el consistorio el curso pasado con la voluntad de impulsar mejoras en la movilidad sostenible del alumnado y de las familias. Se desarrollaron jornadas de sensibilización, orientación y formación dirigidas a los equipos directivos, a las asociaciones de familias de alumnado y a los otros colectivos que puedan intervenir en el proceso, como la Guardia Urbana o los técnicos de Urbanismo y Movilidad.
En concreto, los centros participantes en el proyecto son los colegios Sant Pau Apòstol, Dominiquas, Santa Teresa de Jesús, Lestonnac-l'Ensenyançay La Salle Torreforta; las escuelas Saavedra, Cèsar August, Marcel·lí Domingo, Pax ide Ponent y el instituto Antoni de Martí i Franquès.
La empresa adjudicataria realizará las acciones de apoyo y acompañamiento en cuatro de estos centros comprometidos a desplegar un pedibús, después de que una comisión establezca los criterios con el fin de escoger las instituciones que se consideren óptimas para participar en esta primera intervención.
Castaño detalla que eso no quiere decir que el resto de escuelas no puedan avanzar internamente o hacer acciones puntuales. «Hay centros que de forma autónoma han empezado a organizarse, pero lo que queremos es dar un apoyo más profesional», explica.
Además, comenta que la idea es «continuar» el proyecto de cara a los próximos cursos y colaborar con todos los colegios que quieran trabajar en la movilidad sostenible, siempre que se disponga de los recursos para hacerlo posible.
El consejero considera que el bus escolar a pie va dirigido a los alumnos de los ciclos medio y superior de Educación Primaria, aunque falta acabar de establecer los criterios concretos.
La empresa adjudicataria será responsable de todo el material que aporte para la correcta ejecución del contrato, sin que el Ayuntamiento tenga que asumir ningún coste adicional. El presupuesto de licitación es de 13.860,55 euros (IVA incluido). Se efectuará un primer pago, correspondiendo al 40% del total, en diciembre del 2022, mientras que el resto se abonará en julio del 2023.
Los precedentes
El autobús a pie es un fenómeno originado en Australia enla década de 1990 que se ha extendido en los últimos 15 años por el territorio español. Los municipios madrileños de Torrelodones, Las Rozas y Moralzarzal fueron algunos de los primeros en introducir la medida, que también se ha puesto en práctica por todo el país, desde La Rioja hasta Andalucía, pasando por Reus.