Bienes
Una empresa de actividad hostalera comprará en Tarragona el edificio de Riudecols, 8
Flavus Tarraco gana la subasta y gestionará el inmueble con la obligación de preservar el patrimonio
La empresa Flavus Tarraco SL, especializada en la gestión de establecimientos turísticos y de hostelería, ha ganado por 58.500 euros la subasta pública de la finca de la calle de Riudecols, 8. El Ayuntamiento tomó la decisión de vender el edificio municipal e histórico con el fin de rehabilitarlo y, al mismo tiempo, velar por sus elementos patrimoniales.
Por lo tanto, Flavus Tarraco tendrá «la obligación de cumplir la ley de patrimonio en el momento de hacer actuaciones en el edificio», tal como expone el consejero de Bienes y Patrimonio de Tarragona, Hermán Pinedo. La adjudicación del contrato de alienación de la finca se elevará al próximo plenario después de pasar ayer por comisión informativa. El consejero de Territorio y Movilidad, Xavier Puig, comentó que todo el equipo de gobierno había votado a favor.
«Este edificio forma parte del grande conjunto patrimonial del Ayuntamiento, el cual no tiene la capacidad para mantenerlo todo. Había la posibilidad y viabilidad para que alguno privado se lo pudiera quedar, velara por cumplir las obligaciones de conservación y le diera vida», apunta Puig, quien felicita al departamento de Bienes, encabezado por Pinedo por la actuación. «A la PartAlta le va bien alguien que se ocupe del edificio y lo cuide, aparte de favorecer la actividad económica», añade el consejero de Territori.
Flavus Tarraco también es la empresa propietaria del edificio de la calle de los Cavallers 4Bis, donde se encuentra Hostal 977, un pequeño hostal con diferentes tipos de habitaciones, espacio de lectura y café y servicios de información turística. Este establecimiento se encuentra sólo a un minuto del edificio de Riudecols, 8, que hace esquina con la plaza de Ripoll.
La finca, hoy día, se encuentra en estado ruinoso y tiene todos los accesos bloqueados. «Un edificio que lleva décadas cerrado, con problemas de conservación y suciedad», tal como lo define Pinedo. Para revertir la situación y mejorar su estado, el Ayuntamiento de Tarragona lo sacó a subasta pública a principios de este verano, con un precio de salida de 56.000 euros.
La actividad económica que se generará será en beneficio del edificio y del dinamismo de la PartAlta, según apuntó el mismo Pinedo. En cualquier caso, desde el consistorio insisten en que el nuevo propietario tendrá que respetar y velar por la preservación de los elementos patrimoniales del inmueble, como las inscripciones romanas.