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Movilidad

El consistorio ampliará las aceras de diferentes calles y avenidas de Tarragona

Parte del presupuesto de 2023 se quiere destinar a aumentar el espacio para peatones en varios ejes estratégicos, como el paseo de la Independencia

Un tram del passeig de la Independència no té vorera.

El consistorio ampliará las aceras de diferentes calles y avenidas de TarragonaRoger Freixa

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El Ayuntamiento de Tarragona destinará una partida presupuestaria a la ampliación de aceras de diferentes calles y avenidas estratégicas de la ciudad. En este sentido, plantea la futura ampliación del espacio para peatones en torno a la Necrópolis Paleocristiana, que irá a cargo del Estado, y en el paseo de la Independencia y en el puente del Francolí de la avenida de Ramón y Cajal, a cargo del consistorio. «Ahora se han hecho actuaciones de pintura en el paseo de la Independencia, pero próximamente serán de obra», apunta el consejero de Territorio y Movilidad, Xavier Puig. La adecuación de la Necrópolis comportará para el Ministerio de Cultura la inversión de 7 millones de euros, provenientes de fondos europeos Next Generation, y servirá para urbanizar su entorno y mejorar la circulación de peatones. «Estamos trabajando con ellos a fin de que este entorno sea más digno y majestuoso», expone Puig.

Paralelamente a esta intervención, que dignificará el espacio del paseo de la Independencia por el lado Tabacalera, el Ayuntamiento intervendrá en el lado de la vía más próximo al río Francolí y también en las aceras que dan acceso al Tanatorio Municipal desde el puente de la avenida de Ramón y Cajal. «En el acceso hacia el tanatorio, las aceras tienen que ser mucho mejores que las que hay ahora», señala el consejero de Territorio.

Con respecto al calendario, las obras relativas a la adecuación de la Necrópolis tienen que cumplir unos plazos exigentes por el hecho de que la financiación proviene de un fondo Next Generation. Y con respecto a las intervenciones que son competencia del Ayuntamiento, Puig asegura que «si podemos, lo haremos el próximo año».

Sin embargo, el equipo de gobierno dará una «prioridad racional» a las ampliaciones de aceras en función de su estado actual, de la ubicación o de la afluencia de peatones por la calle en cuestión. El consejero considera que estos elementos urbanos tienen una «importancia primordial» en una ciudad y manifiesta que el proyecto hubiera contado con financiación si se hubieran aprobado los presupuestos de este año.

«Hay que hacer aceras que inviten a la gente a caminar», reflexiona Puig. Más allá de la propuesta del gobierno actual, el futuro Plande Ordenación Urbanística Municipal (POUM) definirá la anchura mínima que tienen que tener las aceras que se construyan.

«El POUM marcará la línea normativa para cualquier nueva urbanización que se haga», explica el tercer teniente de alcalde, quien detalla que a raíz del proceso participativo se definirá con exactitud esta anchura mínima. Hoy día, muchas vías de la ciudad, sobre todo en la Part Baixa, cuentan con aceras de menos de dos metros.

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