Transporte
Reclaman que la L-55 no acabe en SPiSP y llegue hasta la avenida Catalunya de Tarragona
La propuesta presentada por la AV La Unió de Sant Pere i Sant Pau y la AV de Mas Pastor contempla también que el nuevo recorrido pase por Tarragona II
La Empresa Municipal de Transporte (EMT) estudia modificar la L-55 para que esta no acabe en el barrio de Sant Pere i Sant Pau y llegue hasta Tarragona, atendiendo la petición presentada por la AV La Unió de Sant Pere i Sant Pau y la AV de Mas Pastor, que hace años que lo reclaman.
Además, piden que este nuevo recorrido haga parada en Tarragona II, donde todavía no pasa ningún autobús. Según ha informado la EMT al Diari Més, están estudiando la propuesta, «pero no será fácil poder implementar todos estos cambios». La L-55 conecta actualmente Mas Pastor con Sant Pere i Sant Pau, pasando por Rodolat del Moro. «El cambio principal sería que el bus llegaría hasta la avenida Catalunya, a 4 Garrofers», explica Gabriel Muniesa, presidente de la AV La Unió. «Otra de las peticiones es que pase por Tarragona II», añade. La urbanización no cuenta con ninguna parada y la intención sería colocar una en la calle Pi i Maragall y otra delante de la Escuela PAX.
«También hemos planteado que se coloque una parada dentro del barrio de Rodolat del Moro, ya que la que hay ahora se encuentra en las afueras», comenta Muniesa. El objetivo es facilitar el uso de esta línea a las personas mayores. Con respecto a los horarios propuestos, «están adaptados a los de los alumnos de las escuelas e institutos, estos cambios también son para ellos».
En este sentido, el nuevo recorrido pasaría por delante del Instituto Sant Pere i Sant Pau y también por la avenida dels Països Catalans: «Ahora pasará por las dos universidades, la del Campus Sescelades y la del Campus Catalunya. Eso beneficia a muchos jóvenes de los Pallaresos».
Desde la EMT afirman que están estudiando la propuesta vecinal, pero «la petición resulta complicada». El inconveniente mayor es que alargar el recorrido comportaría también una bajada en la frecuencia de paso de los autobuses.
«Ya nos hemos reunido con técnicos de laEMT y nos comentaron que de los más de treinta viajes que se hacen ahora, pasarían a ser veinte, pero creemos que son cambios necesarios, sobre todo para las personas mayores de nuestros barrios», expresa Muniesa. «Confío en que al final se lleve a cabo», concluye.