Asistencia en carretera
La falta de conductores alarga la espera de la grúa hasta las dos horas en Tarragona
Las empresas denuncian que las aseguradoras «no pagan suficiente» y que eso no les permite ampliar la plantilla de operarios
«Con las tarifas que nos ofrecen las aseguradoras, las empresas de servicios de asistencia en carretera no podemos pagar lo que piden los operarios de grúa y eso hace que haya problemas para encontrar conductores», lamenta Xavier Martí, portavoz de Alianza Nacional de Auxilio en Carretera, una entidad que nació en mayo a raíz de la situación crítica que vive el sector a nivel económico y que vela por los intereses de las compañías.
«El incremento de los costes ha hecho que con lo que pagan las aseguradoras, a veces, ni llegamos a cubrir gastos», denuncia Martí, que explica que eso «dificulta la contratación de conductores cualificados porque no pueden ofrecer un buen sueldo». Esta situación provoca que las empresas, de Tarragona y de todo el país, no puedan cubrir algunos turnos, sobre todo de noche y festivos, o que los servicios de asistencia en carretera se retrasen hasta una o dos horas. Según datos de laAlianza de Auxilio en Carretera, la contratación de conductores se ha reducido en un 27% con respecto al semestre anterior. Esta bajada también se ha vivido en Tarragona, aunque «los datos son un poco inferiores», asegura David Pastor, gerente de Gruas Valls Motor y responsable de la Asociación Catalana de Empresas de Asistencia en Carretera enTarragona. Pastor indica que en la provincia hay aproximadamente una decena de compañías y que algunas «se están planteando no ofrecer servicios de noche, festivos y fines de semana».
Actualmente, las aseguradoras están pagando entre 28 y 31 euros por hora de servicio. Pastor asegura, sin embargo, que «según un estudio de mercado elaborado recientemente, se calcula que pagar por un servicio urbano cargando un coche supone unos 75 euros».
En este sentido, Martí asegura que «por ley, en el sector del transporte no se puede trabajar por debajo de los costes, la cuestión es que las aseguradoras consideran que somos del sector servicios». El portavoz de Alianza Nacional de Auxilio en Carretera señala el agravio comparativo que existe entre España y Francia, donde se paga 65 euros por hora. «Hace 15 años que no se revisan las tarifas», comenta.
Aunque este problema lleva años existiendo, no ha sido hasta ahora que ha explotado la burbuja. «La gente iba aguantando, pero el aumento del precio del gasóleo ha sido la gota que ha hecho colmar el vaso», apuntaMartí. Pastor, por su parte, asegura que «en dos años el precio del gasóleo ha subido en torno a un 52% y eso no lo han tenido en cuenta».
Es por eso que en el último verano se creó la Alianza Nacional de Auxilio en Carretera para advertir a las aseguradoras de la problemática que está ahogando al sector. «Durante estos meses se han mantenido reuniones y algunas están predispuestas a negociar», explica el portavoz de la entidad.
Martí insiste en que es muy necesario acordar una subida de las tarifas, porque muchas empresas, sobre todo pequeñas, podrían cerrar. De hecho, algunas compañías han tenido que cambiar su modelo de negocio y ahora se dedican al transporte de maquinaria o se convierten en talleres para sobrevivir.
«Uno de los principales afectados son los usuarios», afirma Pastor. Y es que el tiempo de espera de la grúa se puede alargar hasta dos horas por la falta de conductores. «Algunas empresas están reduciendo plantilla y eso hace que no se lleguen a cubrir todos los turnos o que tarden más enrealizar los servicios», añade Martí, que lamenta que «si alguien llama por la noche, quizás no lo pueden atender hasta el día siguiente. También se rechazan algunas demandas porque son inviables y, antes, eso era impensable».
Otro sector que sufre los mismos problemas que el gremio de la asistencia en carretera es el de las reparaciones de vehículos. «Dependes de las tarifas que imponen a las aseguradoras y en muchos casos, el servicio que hacemos nos sale a pagar», asegura el propietario de un negocio especializado en reparar y sustituir cristales.