Tarragona presenta la ruta cicloturística de la Vía Augusta en FITUR 2023
El nuevo itinerario de ecoturismo une quince poblaciones siguiendo los 1.600 kilómetros del antiguo trazado romano
El alcalde de Tarragona y consejero de Turismo, Pau Ricomà, ha presentado este jueves en FITUR la ruta cicloturística cultural de la Vía Augusta, un nuevo producto de turismo sostenible que se desarrollará entre los años 2023 y 2024 y que une quince poblaciones de Andalucía, Castilla-La Mancha, Región de Murcia y Cataluña a través del antiguo trazado romano de la Vía Augusta en un total de 1.600 km.
Durante el acto, Ricomà ha sido acompañado por Noelia Arroyo, alcaldesa de Cartagena, una de las poblaciones que, junto con Lezuza (Castilla la-Manxa) y Tarragona integran la parte de la ruta que transcurre fuera de Andalucía; y por Juan Manuel Ávila, el alcalde de Carmona y presidente de la Ruta Bética Romana –la asociación de poblaciones andaluzas que ha impulsado y originado la nueva ruta de la Vía Augusta.
Precisamente desde Carmona, se presentó el proyecto de la ruta cicloturística de la Vía Augusta a los Fondos Next GenerationEU, de los cuales ha recibido una financiación de 442.500 euros.
Recorriendo los yacimientos romanos de la Vía Augusta
La nueva ruta cicloturística cultural de la Vía Augusta recurre 1.600 kilómetros del antiguo trazado romano siguiendo un recorrido vinculado a los yacimientos romanos que se pueden encontrar en los quince municipios de las cuatro Comunidades Autónomas que recurre el itinerario.
Desde el germen de la Ruta Bética Romana, el nuevo producto turístico recorre los municipios andaluces de Santiponce, Carmona, Osuna, Almodóvar del Río, Còrdova, Montoro, Almedinilla, Puente Genil, Écija, Marchena, Cádiz y Baena; y se extiende hacia Castilla-La Mancha pasando por Lezuza, por la Región de Murcia haciendo parada en Cartagena, y por Cataluña, con Tarragona, en un sentido amplio, ya que la ruta recurre el patrimonio y los paisajes de las poblaciones de la misma ciudad y de Altafulla, Torredembarra, Creixell y Roda de Berà.
El proyecto quiere preservar el legado inmaterial de la Vía Augusta y aprovechar la oportunidad para diversificar, deslocalizar y reconvertir el turismo cultural basado en el patrimonio romano en una ruta en bicicleta que genera una experiencia turística sostenible de mayor atractivo y valor añadido.
El plan de acción para desarrollar el proyecto los próximos 18 meses pivota sobre tres ejes estratégicos: la creación de una red de destinaciones turísticas, el impulso de la experiencia turística y la promoción conjunta de estas destinaciones y experiencias.