Las ventas de la ONCE suben en Tarragona un 10% y llegan a cifras prepandémicas

La irrupción del covid supuso un golpe muy duro para los vendedores de la Organización Nacional de Ciegos Españoles (ONCE), que vieron cómo los tarraconenses dejaron de comprar lotería durante la pandemia. La dinámica negativa, sin embargo, ha cambiado drásticamente este último año, en el que las ventas se han incrementado un 10% con respecto al 2021.

«Con esta subida, se ha llegado a los resultados del 2019, incluso se han superado», comenta la directora de la entidad en Tarragona, Raquel Saavedra. Este aumento se ha notado de manera generalizada en el país, «aunque en Cataluña falta un 2,5% para llegar a las cifras de antes de la pandemia». En el 2020, las ventas de laONCE cayeron hasta un 31,4% a causa de la pandemia. Las restricciones de movilidad, así como las que sufrieron los comercios y la hostelería, provocaron esta gran bajada, de la que poco a poco se han ido recuperando.

«En los últimos cuatro años, sobre todo a partir del 2020, nuestros trabajadores han estado luchando para conseguir remontar», comenta Saavedra, quién celebra que en Tarragona se ha cumplido el objetivo. «Eso ha sido posible sobre todo por el crecimiento que se ha experimentado durante el último 2022», asegura.

La directora de la entidad atribuye esta recuperación a dos grandes factores: «El esfuerzo de la plantilla y la renovación de nuestros productos». Actualmente, hay 51 sorteos a la semana. Saavedra detalla que el marzo pasado se renovó el formato del Eurojackpot, incluyendo un nuevo sorteo los martes, cupón diario. También se hicieron cambios en el cupón diario de lunes a jueves, en el cupón de los fines de semana y en el Cuponazo.

«Se han incrementado las posibilidades de ganar gracias a los cambios que se han hecho, ya que también se premia si coinciden los números por delante o por detrás», comenta. Este ha sido un gran incentivo para que la población vuelva a comprar boletos. Además, apunta que hay muchos lanzamientos de productos de lotería instantánea, que «permiten llegar a más público, tanto personas mayores como jóvenes».

Saavedra ha querido destacar «el esfuerzo» que han hecho los 172 vendedores que hay en la ciudad y que han jugado un papel clave para alcanzar un incremento de las ventas. Por otra parte, la directora de laONCE en Tarragona, explica que ha aumentado la plantilla, un 8% en la provincia y un 10% en Cataluña. Sin embargo, indica que habría que incorporar a unos 45 vendedores para compensar jubilaciones y bajas: «Nuestra intención es estabilizar la plantilla o, incluso, aumentarla».

La institución celebra esta recuperación en la venta de cupones y loterías, ya que supone un gran impulso para conseguir el objetivo final de la entidad: «Todo eso hace que la ONCE pueda prestar sus servicios a personas discapacitadas».

Por ejemplo, talleres de animación cultural, de rehabilitación o de voluntariado. Aunque la entidad nació para dar apoyo a las personas ciegas, también a aquellos que sufren cualquier otra discapacidad. «Se ofrece trabajo y, a través de la Fundación, se da apoyo económico a proyectos de entidades que ayudan a estos colectivos», dice.

Un vendedor de la ONCE, que hace tres años que monta su puesto en las Gavarres, reconoce que «en el 2021 subieron muy poco, ha sido en el 2022 cuando la gente ha vuelto a gastar». Valora muy positivamente las ventas del último año, pero reconoce que vive con la incertidumbre de no saber si la inflación las hará disminuir en el 2023.