Educación
Quejas en los centros escolares de Tarragona por los nuevos exámenes censales de catalán
Las escuelas reprochan al Departamento de Educación de Cataluña el poco tiempo de antelación que han tenido para preparar las pruebas
Del 1 al 31 de marzo todos los centros educativos de la demarcación de Tarragona están haciendo una nueva prueba de comunicación oral de lengua catalana a los alumnos de sexto de primaria y cuarto de ESO. Aunque al inicio de curso ya se hizo saber a las escuelas cuándo se harían, estas reprochan al Departamento de Educación que han conocido los detalles de la prueba hace poco, y se quejan de que han tenido muy poco tiempo de antelación para poder prepararla. De hecho, la USTEC y el sindicato de CCOO están recopilando todas las quejas, y tienen previsto transmitirlas al Departamento. Esta planificación no ha gustado en los centros escolares, ya que aunque, en un inicio, la medida fue bien vista por la comunidad docente como una herramienta para analizar la situación del catalán en las aulas, ahora denuncian que la poca antelación con la que han conocido las características de estas pruebas y el hecho de que sean los mismos profesores del centro los encargados de llevarlas a cabo está provocando un nuevo desbarajuste organizativo en escuelas e institutos.
En Tarragona, algunas escuelas también han mostrado su descontento con la situación, ya que se trata de una prueba que cada centro tiene que organizar internamente, y que a menudo implica dejar de hacer otras tareas, desdoblamientos o refuerzos entre profesores y haber de utilizar otras horas o asignaturas de clase para hacer la prueba.
Por otra parte, los docentes se quejan del hecho de que el periodo de la nueva prueba coincide con las evaluaciones de final de trimestre de muchos centros, lo que les hace tener «un calendario muy apretado», según afirma Sergi Moncusí, director de la escuela Saavedra de Tarragona.
«Todo eso nos coge en medio de un momento en el que estamos con las pruebas de final de trimestre, y también se nos abrirán los plazos de hacer las preinscripciones escolares de cara al próximo curso, por lo que hoy por hoy se nos presentan unas semanas con un ritmo de trabajo bastante intenso», explica.
Por otra parte, y siguiendo con el pensamiento general, desde el centro ven con buenos ojos velar por la mejor capacidad comunicativa de los niños, pero también consideran que esta nueva prueba oral es un ejemplo más de «la mala planificación del Departamento de Enseñanza, que demuestra una vez más que el sistema educativo actual necesita cambios», señala el responsable de la escuela tarraconense.
Desde la escuela Pau Delclòs, en cambio, valoran muy positivamente la idea y la metodología de esta nueva prueba oral en catalán. «Como las competencias básicas son de un formato escrito, vemos positivo que esta prueba sea oral, con el fin de poder complementarlo y tener las dos versiones», observa Núria Muñoz, jefa de estudios del centro.
«Sí que es verdad que el hecho de que lo tengamos que montar todo nosotros en las horas libres de los profesores nos supone mucho trabajo añadido», admite, «pero también vemos que muchos de nuestros alumnos pasan vergüenza y muchas dificultades a la hora de hablar en voz alta y con público, por lo que pensamos que es una idea buena para nuestros alumnos», continúa. «Además, que la prueba la puedan hacer con un amigo y delante de un profesor que ya conocen y le tienen confianza, les ayuda mucho más», concluye una de las responsables del centro.
Se pedirán cambios a Educación
Desde la Unión Sindical de los Trabajadores de Enseñanza de Cataluña (USTEC) y la Intersindical de Educación, ven contraproducente este modus operandi, ya que «puede comprometer los resultados de las pruebas a causa de la conexión emocional que puede haber entre los docentes y los alumnos examinados y que puede afectar a la objetividad a la hora de corregir», apuntaron.
De hecho, ambas organizaciones y CCOO enviarán una petición formal al Departamento de Educación alegando que, de cara a los próximos años, haya modificaciones. «La gente se nos está quejando de que conocieron los detalles de la prueba con muy poca antelación, y con informaciones no muy claras, que les hacen tener muchas dudas a la hora de llevarla a cabo. Es por eso que tenemos pensado enviarlo todo al Departamento de Educación de Cataluña cuando pase el mes de marzo», informó Paco Carbonell, del sindicato CCOO Educación Pública.