«Este gobierno está pecando de ir tarde, no se puede hacer todo a última hora»

—¿Como definiría el periodo comprendido entre la marcha de Hernán Pinedo y Carla Aguilar de la formación, hasta la actualidad?

— Han sido dos años que hemos lanzado prácticamente a la basura. El gobierno actual es un gobierno débil, que cuenta con una minoría absoluta y una oposición que sólo ha hecho que criticar, lanzando uno contra el otro, y no hemos podido avanzar nada. Nos hemos olvidado de mirar a la larga, y jugamos siempre a corto plazo. Este gobierno está pecando de ir tarde. No se puede hacer todo a última hora.

— ¿Considera que falta cohesión entre los partidos y que una mejor comunicación ayudaría a velar mejor por la sociedad?

— Sí, sin duda. Un gobierno tiene que pensar en la ciudad entera, no sólo en su parte. Eso, desgraciadamente, está sucediendo desde hace tiempo, y no estamos encontrando puntos de comunicación. ERC y la CUP han dado un giro hacia la derecha de la mano de Junts, con medidas que nos extrañan y que no compartimos en absoluto como la instalación de cámaras en los barrios o el nuevo modelo policial de seguridad. Nosotros defendemos un modelo de policía de proximidad, basado en conocer las opiniones de la gente de la calle. En definitiva, estar cerca de la población para saber exactamente qué pasa.

— Con el fin de solucionar eso, ¿os planteáis un pacto entre los partidos de izquierdas?

— Des de Comuns Podem no descartamos ningún pacto, pero no todo vale. El programa es una cosa muy importante a la hora de establecer pactos, y en la que nos fijamos mucho. Compartimos muchas de las ideas de nuestros compañeros de las formaciones de izquierdas, pero pensamos que no se están enfocando bien. No es tan relevante el qué, sino el cómo. Tenemos que enfocar la política hacia las personas y no tanto en el mantenimiento del espacio. Tenemos que mirar hacia la izquierda con un programa progresista, y en eso la gente de ERC y de la CUP son claves. Si alguien se declara socialdemócrata, a mí ya me sirve.

— Por lo tanto, ¿es más probable un acuerdo con ERC y CUP que con el PSC? — Nos tendríamos que entender entre los cuatro, sinceramente. Por nuestra manera de hacer, no tiene ningún sentido hacer un pacto con Junts, el Partido Popular o Ciudadanos. Tenemos que profundizar en un modelo progresista porque la ciudad así nos lo pide. Se nos aproxima una legislatura que será de suma importancia para todo el mundo.

— Históricamente, a los partidos de izquierdas les ha costado más ponersede acuerdo entre ellos que los de derechas, ¿aquécree que es debido?

— Personalmente, pienso que tiene que ver con una herencia cristiana. La premisa de que estos son de un bando y aquellos del otro, nos hacen perder el norte. No nos equivocamos, todas las otras formaciones tienen gente muy válida ensus filas, pero cuando llegan a cierto estatus, pierden la perspectiva propia y actúan más a favor de aquello suyo que a favor de lo que realmente necesita la ciudad. Es el problema que tenemos enla izquierda, hacemos una mirada sectaria que borra la capacidad de saber las cosas que se tienen que hacer.

— ¿Sobre qué girará su programa electoral de este 28-M?

— La educación, la perspectiva climática y la vivienda. Con respecto al sector educativo, está estropeado. Hemos dejado de meter tanto dinero y lo estamos notando con tantas quejas que vienen de los profesionales que se dedican. Tenemos que invertir más dinero en educación con el fin de recuperar la confianza y el buen funcionamiento de un sector que consideramos que es esencial. Con respecto a la climatología, nos estamos centrando en una mirada ecologista de la naturaleza, y nos estamos olvidando de la ciudad. Lo hacemos con una visión de cómo la desarrollamos, en vez de cómovivimos, que sería lo realmente importante. Y finalmente, la vivienda. Se nos están disparando los pisos turísticos y los estamos sustituyendo por la vivienda real para la gente que lo necesita. Estamos generando turismo donde tendríamos que generar vivienda. La gente de la ciudad se está yendo a vivir a los pueblos del lado y estamos perdiendo población.

— ¿Le preocupa socialmente que al frente de las dos listas que conforman la candidatura, no haya ninguna mujer?

— No. Cumplimos con la ley de 2 de 5, las tres siguientes serán mujeres. Nuestra bandera es evidente, me declaro feminista por acción, esta bandera no nos la tomará nadie.

— ¿Cómo se puede solucionar el desinterés que está sufriendo últimamente tanta gente con la política?

— Tenemos que estar más atentos que nunca en lo que necesita la ciudadanía. Es muy importante tener presencia en las redes para saber qué se cuece, pero todavía lo es más estar a pie de calle. Tenemos que escuchar a la gente, entenderla, y conocer sus opiniones para saber en qué tenemos que mejorar. Tenemos dos orejas y una boca para escuchar el doble de lo que hablamos.

— ¿Por quées especialmente importante la siguiente legislatura?

— Con el POUM tenemos en frente la tarea de dibujar la ciudad de los próximos 30 años, lo queno será nada fácil. Tenemos que pensar en hacer una ciudad habitable. Además, se tienen que ejecutar bien los Next Generation, impulsar la Anella Verda, y la reutilización del río Francolí, entre otros.

— ¿Qué diferencia a En Comú Podem del resto de formaciones políticas?

— Nuestros valores. La gente se nos queja del hecho de que nos centramos en las personas y no en generar economía, nosotros respondemos que si la economía no está al servicio de las personas, no sirve de nada. Queremos que todos los barrios sean tratados por igual, por eso defendemos una inversión por distritos, para no dejar a nadie de lado. Es el momento de demostrar a la gente que somos únicos y necesarios en este momento tan importante para Tarragona. Tenemos una buena estructura interna y estamos centrados en hacer las cosas bien.