Los caballos vuelven a cautivar niños y adultos durante los Tres Vuelcos en Tarragona

El trote de los caballos en su paso por las calles de Tarragona volvió a captar la mirada de pequeños y grandes durante la festividad de los Tres Tombs. La tradicional jornada, organizada por el Gremi de Pagesos de Sant Llorenç i Sant Isidre, se celebró durante el día de ayer. El desfile arrancó en la avenida de Vidal i Barraquer, donde el sol ya hacía lucir el pelaje de la sesentena de caballos, procedentes de toda Cataluña, que acompañaban los veinte carros presentes.

«Es espectacular. Hemos salido a pasar el domingo y enseñar a la niña los caballos, ya que le gustan mucho los animales», comentaba el vecino de Torres Jordi Iñaki González mientras observaba el inicio del recorrido. Al salir de Vidal y Barraquer, el desfile continuó por la calle de Francesc Bastos y por la avenida de Ramón y Cajal antes de llegar a la Rambla Novay al monumento de Roger de Llúria, junto al Balcódel Mediterrani. «Hace años que venimos. Es muy bonito y una buena manera de recuperar la tradición de nuestros abuelos», apuntaba Llorenç Fonts, residente en Alcover. Fuentes, de la mano de la familia, dedicó todo el sábado a preparar sus cuatro caballos, que lo acompañaron por la ciudad.

También acudió con su familia el candidato a la alcaldía del PSC, Rubén Viñuales. «Hemos venido con las hijas, que hoy tienen una buena oportunidad para ver los caballos. Es una tradición muy bonita que nos une al pasado», relataba Viñuales. Otros políticos tarraconenses aprovecharon la jornada del domingo para salir a la calle, como las conselleres Lorena de la Fuente (Ciudadanos), Elvira Vidal o Cristina Guzmán (Junts por Tarragona). También se dejó ver al alcalde, Pau Ricomà, y el cabeza de lista de Junts per Catalunya, Jordi Sendra. «No permitiré que se pierdan las tradiciones tarraconenses, aunque determinados partidos del consistorio quieren su desaparición», lanzó Sendra a través de su perfil a redes sociales.

Por su parte, Miquel Navarro, vecino de la ciudad, hace años que sale a la calle a vivir desde la primera línea la festividad de los Tres Tombs. «Cada vez hay menos carruajes. Años atrás todo era más vistoso. Supongo que el presupuesto es inferior», señaló. Navarro traíaa sus hijos cuando eran pequeños y desea que la tradición perdure a lo largo del tiempo: «Que se mantenga con más o menos caballos, pero lo importante es que no desaparezca».

Paralelamente, la Asamblea Antiespecista de Tarragona protestó porlos «daños» a los cuales se someten los animales durante los Tres Tombs. Estamos para rechazar y denunciar su explotación. Los caballos son muy sensibles y días como este tienen consecuencias negativas para ellos», lamentaba una portavoz. La organización repartió folletos informativos donde se enumeran varios perjuicios que les podrían provocar estrés y miedo, así como mal físico a causa de la sobrecarga, las espuelas, las anteojeras o las bridas.