Tarragona destina el 19,8% de las ayudas de urgencia a paliar la crisis energética

Los equipos básicos de atención social de Tarragona tramitaron un total de 2.791 ayudas de urgencia durante el 2022, de las que el 19,8% fueron para paliar la pobreza energética. Es decir, 553. En este sentido, el incremento de precios de la electricidad, el agua y el gas en los últimos años han provocado que mucha gente pida asistencia para poder reducir la factura. Por otra parte, el Instituto Municipal de Servicios Sociales (IMSST) atendió a 13.743 personas y un 57% fueron mujeres.

Con respecto a la crisis energética, Tarragona ya concedió el 23,3% de las ayudas a esta causa en el 2021. «Muchas empresas eléctricas están obteniendo un mayor número de beneficios con el aumento de precio de la luz», expresa la consejera de Servicios Sociales y presidenta del IMSST, Inés Solé, quien, al mismo tiempo, subraya la importancia del Punto de Asesoramiento Energético (PAE), puesto en marcha en enero del 2022.

Este servicio presta atención de manera prioritaria a las unidades familiares que se encuentran en una situación de vulnerabilidad energética. «Ofrecemos ayuda y acompañamiento a la gente que no tiene suficientes herramientas para paliar la factura de la luz», manifiesta Solé.

En esta misma línea, el IMSST impulsó los contadores sociales solidarios del agua conjuntamente con la Empresa Municipal Mixta de Aguas de Tarragona (Ematsa). «Las familias usuarias de Servicios Sociales que no pueden asumir la factura se adscriben al contador que pagamos desde Ematsa», explica la presidenta del IMSST.

El acceso a la vivienda, de la misma manera que la pobreza energética, es uno de los problemas de hoy día. Así lo ilustran los datos recogidos por los equipos básicos de atención social: un 44% de las problemáticas diagnosticadas el año pasado es por dificultades económicas y de la vivienda. «Hay un colapso en el sistema que está beneficiando a las multinacionales», señala Solé.

En total, en el 2022 se concedieron 2.791 ayudas de urgencia social, un 43,63% menos que en el 2020, cuando se concedieron 4.951. Esta reducción progresiva, que ya se notó en el 2021, ejemplariza el impacto de la pandemia y la posterior recuperación de la normalidad. Del total de ayudas del año pasado se beneficiaron 6.496 personas. Al mismo tiempo, más de la mitad fueron para la manutención. «Es la primera cuestión vital básica», expone la consejera.

Feminización de la pobreza

En cuanto a las personas atendidas en los Servicios Sociales Básicos durante el 2022, la mayoría fueron mujeres. «La pobreza tiene rostro de mujer. Arrastramos problemas estructurales del sistema patriarcal. Este porcentaje se produce a causa de que las mujeres son las que habitualmente se dedican a las tareas del cuidadoy de atención al hogar, aparte de que muchas son víctimas de la economía sumergida», comenta Solé.

Paralelamente, el 36% de las 13.743 personas atendidas en los servicios sociales básicos son personas nacidas fuera del Estado español. «Este porcentaje desmonta la teoría que los de fuera se lo quedan todo y tienen más privilegios», comenta la presidenta del IMSST. Y añade: «Además se tiene que tener en cuenta que las personas extranjeras tienen el contexto en contra y tienen que asumir una serie de dificultades administrativas».