Urbanismo
El Ayuntamiento de Tarragona creará dos caminos en el solar de acceso a la Escuela Joan XXIII
Uno de estos conectará el centro con el barrio de Buenos Aires y, el otro, con la calle Onze
El Ayuntamiento de Tarragona construirá dos caminos de hormigón en el solar que da acceso a la Escuela Joan XXIII. Así, el consistorio pretende dar solución a una reclamación histórica de los vecinos del barrio de Bonavista, que hace décadas que denuncia el mal estado del camino por el que tienen que pasar cada día los alumnos del centro escolar, así como sus familias.
En un planteamiento inicial, el consistorio propone la construcción de un camino que iría desde el barrio de Buenos Aires hasta la Escuela Joan XXIII, y otro que vaya desde las calles Onze y Vint-i-sis hasta el centro. «Muchos niños van andando por estas calles y tienen que continuar su recorrido por el solar», indica el consejero de Territorio, Xavier Puig. «Es un descampado lleno de polvo que, cuando llueve, se enfanga y los chicos no tienen otro camino, es bastante indigno», explica.
El edil asegura que «es una demanda que se hace desde tiempos inmemoriales y nadie lo ha solucionado hasta ahora». Y es que este terreno es de propiedad privada. «No se había llegado nunca a ningún convenio para hacer posible este proyecto y, ahora, lo hemos conseguido», explica Puig, quién comenta que en los próximos días se firmará un «acuerdo de intenciones y un contrato de alquiler de este espacio».
Desde el Ayuntamiento apuntan que, cuando se hacen estos arrendamientos, se paga una cantidad similar al valor del IBI: «Todo el mundo gana, la ciudad y el propietario». «No haremos ningún virgueria, ya que es suelo privado, pero habilitaremos caminos seguros de hormigón, u otro material», afirma el consejero, quien destaca también que será accesible para aquellos que tengan que pasar por el descampado en silla de ruedas hasta la escuela.
Dar respuesta a las quejas
A principios de este curso escolar, la presidenta de la Asociación de Vecinos de Bonavista, Loli Gutiérrez, denunciaba que por el solar pasan cada día «unos 800 niños y hay muchas hierbas, suciedad y animales, como ratas». Por otra parte, señalaba que, en los días de lluvia, se generan hoyos de agua y barro que provocan que los alumnos se mojen antes de llegar a la Escuela Joan XXIII.
Con la propuesta del Ayuntamiento, se quiere dar respuesta a estos problemas, que «se reivindican desde hace muchos años», apunta Alfonso López, presidente de la Federación de Asociaciones de Vecinos de Tarragona y de la Asociación de Vecinos del barrio de Buenos Aires. López ha mostrado su satisfacción por la construcción de estos caminos de hormigón, que mejorarán y facilitarán el acceso al centro escolar.