La comunidad islámica ofrece 'iftar' solidarios en Tarragona durante los días de Ramadán

Eliftar es la cena que rompe el ayuno del Ramadán. Cada día, en torno a las siete de la tarde, la Comunidad Islámica Assalam organiza un iftar solidario en el Centro de Culto de Sant Pere i Sant Pau. «Lo hacemos para la gente musulmana que tiene la familia lejos, como menores no acompañados, estudiantes u otras personas que por varios motivos están solas», explica el vicepresidente de la entidad, Mounaim Boutahar. Hace una semana, el 23 de marzo, empezó el Ramadán, «una época de reflexión y purificación del alma, de acercarse a Allah y ser la mejor persona posible».

Una veintena de personas se acercan diariamente al Centro de Culto Islámico de Sant Pere i Sant Pau para participar en eliftar popular, «el momento en el que tenemos derecho a comer y a beber» y que está marcado por la hora en la que se pone el sol. «Rompemos el ayuno con una cosa sencilla, dátiles y leche, y después empezamos con la oración», detalla Boutahar, quien indica que en el mes de Ramadán no sólo se practica el ayuno durante las horas de sol, sino que se va más allá: «Significa renunciar a todo mal, ya sea hablar mal de alguien a sus espaldas, mentir, mantener relaciones sexuales o fumar».

Los iftar solidarios se empezaron a hacer el año pasado: «Antes de la pandemia no teníamos centro y en el 2021 no se pudo celebrar por la crisis sanitaria del covid». Boutahar apunta que en otras mezquitas y centros de culto de la ciudad, también se han hecho estas cenas en comunidad. «Eliftar hace un llamamiento a la unidad, es un momento en el que las familias se reúnen», explica el vicepresidente de la Comunidad Islámica Assalam.

Cena popular

Este año, el último día de Ramadán será el 21 de abril. Dos días antes, el 19, la comunidad musulmana ofrecerá uniftar popular a los vecinos, como el año pasado. «Nuestro objetivo es fomentar la convivencia y la cohesión social, nuestro objetivo es que sea una fiesta que se celebre cada año», afirma Boutahar. También quieren dar a conocer el Ramadán, «el mes más sagrado de la religión islámica, cuando el Corán fue revelado a nuestro profeta Mahoma».

Por otra parte, Boutahar apunta que se han dejado atrás todos los malentendidos con los vecinos que se oponían a la construcción del Centro de Culto en el barrio: «El problema era el desconocimiento, que creaba miedo, pero ya se ha normalizado».