La recepción de las alertas en los móviles empeora en la demarcación de Tarragona con respecto a la primera prueba

«A mí no me ha llegado nada. De las 9 personas que estamos en la oficina ahora mismo, sólo le ha llegado a una persona». Esta era una de las decenas de respuestas que recibió Protección Civil de la Generalitat por Twitter cuando publicó que se había enviado correctamente el mensaje de prueba de las alertas de emergencia en los teléfonos móviles de las comarcas del Camp de Tarragona, Terres de l'Ebre y Penedès.

Y es que los resultados que se obtuvieron ayer no fueron nada satisfactorios. Según fuentes oficiales, por la noche ya había más 5.000 encuestas completadas por la ciudadanía y sólo un 37,5% manifestó haber recibido el aviso. Desde Protección Civil mostraron su «gran preocupación por los resultados, que aunque provisionales, muestran un problema que hay que solucionar».

El test que tuvo lugar ayer en la demarcación dejó a la población con cierta intranquilidad, al ver que no todo el mundo recibía el aviso. Aunque en el aspecto técnico, Protección Civil no sufrió ningún tipo de incidencia para enviar el mensaje, lo cierto es que el porcentaje de recepción en los dispositivos móviles fue bastante bajo con respecto a la primera prueba llevada a cabo en las regiones de Lleida, el Alt Pirineu y el Arán el 28 de febrero. En aquel caso, respondieron unos 5.400 usuarios a la encuesta y el índice de recepción llegó en torno al 80%, una cifra muy superior al 37,5% que se obtuvo ayer en la demarcación.

Desde Protección Civil apuntan que uno de los motivos de este alarmante porcentaje es que los clientes de algunas compañías telefónicas, de manera generalizada, no recibieron el mensaje. Los resultados provisionales indican que, en el caso de los clientes de una de las compañías, hasta un 90,7% lo recibieron, mientras que se han dado resultados «anómalamente bajos» con otras dos grandes operadoras: en un caso, sólo lo recibieron un 7,6% de los usuarios, y en el otro, un 6,8%. Dado este problema, instan al Estado, «creador de la herramienta de envíos masivos y competente en materia de telecomunicaciones, a que ofrezca soluciones lo antes posible».

Seguimiento de la prueba

La directora de Protección Civil, Marta Cassany, hizo el seguimiento de la prueba desde el edificio CAT112, acompañada del delegado del Gobierno, Àngel Xifré, la directora de los servicios territoriales de Interior, Eli Llombart, y la directora del Centro de Atención y Gestión de Llamadas de Urgencia 112, Irene Fornós.

Tocadas las 11 de la mañana, las autoridades empezaron a recibir la alerta en sus dispositivos móviles, que emitían un sonido estridente, molesto, pero adecuado y efectivo para un hipotético caso de emergencia. Eso sí, más de la mitad de los periodistas que también estaban en la sala, no recibieron nada. Fue una tónica que se repitió en toda la demarcación, dónde la recepción era bastante heterogénea.

«La prueba, técnicamente ha ido bien», indicaba Cassany, ya que «la alerta se envió en el momento que estaba previsto». Así, se dejó atrás la pequeña incidencia en el que se sufrió durante la prueba de Lleida, que retrasó la hora de envío «unos 15 minutos». Esta primera fase se superó con éxito, pero las anomalías empezaron a llegar durante la segunda etapa, que es el recibimiento de la alerta por parte de los ciudadanos.

Durante la primera hora, con unas 1.500 encuestas completadas, poco más de un 50% de los usuarios manifestaron que habían recibido el aviso. Cassany afirmaba que «había menos porcentaje de recepción que en la primera prueba, pero que «es un resultado provisional» y hasta que no se hagan las 4 pruebas no se tendrán toda la información para valorar definitivamente el sistema de alertas.

Sólo con las encuestas de la primera hora se pudo extraer que los clientes de Vodafone presentaban un índice muy positivo, mientras que los de Movistar y Orange mostraban un porcentaje muy bajo. «El mensaje se envía directamente desde Protección Civil a las antenas, que técnicamente son las que tienen la misión de hacerlo llegar a la población», detallaba Cassany. La directora de Protección Civil aseguraba que desconocían el motivo de estas diferencias operadoras y que son estas mismas «las que lo pueden analizar».

Cassany recordaba que el objetivo es que después de las pruebas que faltan, el 27 de abril en Girona y Cataluña Central y el 31 de mayo en Barcelona, se enviará un informe general al Estado «para mejorar este sistema para el día que lo tengamos que utilizar».

Por otra parte, recordaba la importancia de que los ciudadanos respondan las encuestas, ya que es la única manera de conocer el alcance de las alertas. Desde Protección Civil apuntan que Cataluña es el único territorio del Estado que ha decidido crear encuestas para tener un retorno. Cassany también señalaba la importancia de este sistema, que se utilizará «en caso de emergencia grave y cuando haya que dar una indicación a la población.