Polémica
División de opiniones por la nueva parada de delante de la escuela Marcel·lí Domingo de SPiSP
Algunos vecinos celebran que se haya instalado y otros critican que hayan reducido las plazas de parking
La parada de autobuses que ha instalado la Empresa Municipal de Transportes de Tarragona (EMT) delante de la escuela Marcel·lí Domingo ha creado división de opiniones entre los vecinos de Sant Pere i Sant Pau. Por una parte, están aquellos que lo celebran, ya que, por fin, sus hijos podrán ir en autobús hasta el centro escolar. Por otra, están aquellos vecinos que no lo ven con buenos ojos, principalmente porque agravará el colapso que se vive actualmente en las horas de entrada y salida de los alumnos. Además, critican que con esta acción se han eliminado algunas plazas de parking.
La EMT implementó el lunes pasado la primera fase de reordenación de la línea 55 para mejorar la conexión de Sant Pere i Sant Pau con su ámbito de influencia. Eso ha supuesto la creación de 4 nuevas paradas, una de estas, Uruguay, 1, delante de la escuela Marcel·lí Domingo. Esta noticia cogió por sorpresa a la mayoría de los vecinos, que se pronunciaron por redes sociales. «Es genial para que los niños puedan ir al colegio», comentaba uno de los usuarios. «Ahora mis hijos son mayores, pero me habría venido genial una parada al lado de la escuela», comentaba otro.
Una vecina apuntaba que eso podría «complicar todavía más la circulación en esta calle, que ya es peligrosa a la hora de entrada y salida», cuando los padres van en coche a buscar a los niños. En este sentido, algunos creen que habría sido más adecuado ubicarla unos metros más arriba, cerca del Instituto Sant Pere i Sant Pau, y no justo delante de la escuela, ya que creen que eso puede comportar un «peligro» para los alumnos. En cambio, otros usuarios argumentaban que este problema lo provocan los mismos padres, que paran en «doble o triple fila». «Con estas paradas han extraído unas 10 plazas de aparcamiento», denunciaba un vecino, quien remarca que en el barrio, de por si, hay pocos sitios para aparcar.
«Lo pedimos nosotros, para evitar que los niños no tengan que caminar tramos largos», explica Gabriel Muniesa, presidente de la Asociación de Vecinos La Unió de Sant Pere i Sant Pau. Desde la agrupación ya trabajan con la EMT en la segunda fase de la reordenación de la L-55, para facilitar la accesibilidad a Rodolat del Moro y acercar el servicio a las zonas cercanas a la avenida de Cataluña. «No se tiene que ser egoísta», indicaba Muniesa con relación a las quejas. Además, con respecto a la posibilidad que agrave el colapso en la entrada de la escuela, comenta que el autobús sólo pasará una vez cada hora: «Son los padres los que tienen que aparcar mejor o ir caminando».
Por su parte, Luis Trinidad, presidente de la AV de Sant Pere i Sant Pau, la otra agrupación del barrio, entiende a las personas que tienen quejas de la nueva parada, así como a las que están a favor de esta. Eso sí, lamenta que desde la EMT y el Ayuntamiento de Tarragona no se les haya comunicado nada: «Si lo hubieran hecho, nos habríamos asegurado que tuvieran constancia de la opinión de los vecinos antes de colocarla».