CUP Tarragona aprovechará los equipamientos existentes para cubrir las necesidades de cada barrio

La Candidatura de Unidad Popular de Tarragona propone la elaboración de un inventario, una diagnosis de las necesidades y carencias de cada barrio y el mantenimiento de estos, aprovechando, siempre que sea posible, los equipamientos ya existentes.

La alcaldable de la CUP, Eva Miguel, propone la elaboración de un inventario exhaustivo de locales y espacios vacíos «de propiedad tanto pública como privada» con el fin de poder tener recursos donde ubicar servicios y equipamientos en cada uno de los barrios. La número uno por la CUP ha insistido que esta medida se tiene que llevar a cabo según las necesidades o carencias de cada barrio, «adecuando y garantizando la existencia de equipamientos, infraestructuras y espacios culturales municipales que resuelvan las necesidades concretas»; además de un refuerzo del mantenimiento de los equipamientos a través de un plan de intervención periódico.

Además, Miguel ha expuesto la necesidad de tener un Reglamento de Consultas Ciudadanas que sea vinculante «con el fin de hacer partícipe a la población en la toma de decisiones y futuro de los espacios». El alcaldable ha puesto como ejemplo la necesidad de expropiar en Ca l'Ardiaca, el futuro de la Tabacalera, los pisos superiores del Metropol o la Quinta de Sant Rafael.

A su vez, Jaume López, exconcejal de la CUP y miembro de la lista para las municipales, ha hablado específicamente de las carencias en materia de equipamientos en el barrio del Port y ha insistido en que hay que apostar «por propuestas de más pequeño formato y coste, pero que cambian de manera radical el entorno y el barrio». En este sentido, López ha expuesto la propuesta de la CUP de crear un gran espacio sociocultural en el barrio del Port a que una la plaza de los Infants, los jardines de la Chartreuse, las antiguas naves industriales de la Muller y los jardines de Vapor.

Finalmente, el cupaire también ha propuesto que el antiguo cuartel de Santiyán se convierta en un polo dinamizador del barrio y para las vecinas, «autogestionado y planteando su recuperación por fases».