Sostenibilidad
La energía solar se mantiene al alza en Tarragona y llega a 165 casas más en tres meses
La instalación de placas fotovoltaicas creció un 326,7% en el 2022 con respecto al 2021 y continúa en tendencia ascendente
La demanda de energía solar sigue creciendo este año. Hasta marzo, el Ayuntamiento de Tarragona ya ha registrado 165 comunicaciones previas de propietarios para instalar placas fotovoltaicas. El mantenimiento de este ritmo haría disparar la cifra total de este año hasta las 660, un número que superaría los 559 expedientes recibidos el año pasado, cuando se produjo el crecimiento exponencial de estos sistemas de autoconsumo energético en la ciudad. En el 2022 se dispararon un 326,7% los expedientes tramitados por el consistorio con respecto al 2021, cuando se recibieron 131 comunicaciones.
Uno de los colectivos beneficiados por este escenario es el de las empresas instaladoras de placas. «Esto no se detiene. Sigue creciendo el volumen de llamadas y de solicitudes», explica Òscar Aduà, responsable del área de autoconsumo de Sun Systems Group, una compañía tarraconense.
Los incrementos del precio de la electricidad y los beneficios fiscales ofrecidos por la administración pública son los dos principales factores que han desencadenado la avalancha de peticiones. En Tarragona, se puede obtener una bonificación de hasta el 50% del Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI). «Estoy esperando que me respondan desde el pasado agosto para saber si me hacen la reducción. Hay papeles que no entiendo por qué los piden. Conozco a gente que solicitó la bonificación después y ya han obtenido respuesta», manifiesta Álvaro Pitarch, vecino de Boscos. No obstante, se muestra satisfecho por su decisión de instalar paneles solares.
Pitarch señala que, gracias al excedente, los últimos dos meses ha podido ahorrarse al completo el gasto en electricidad. «Cuando las instalé, el verano pasado, pasé de pagar 300 euros a pagar en torno a 50», afirma el vecino de Boscos, quien está pendiente de cuáles son los mejores momentos del día para consumir energía. «Intentamos arrancar el lavaplatos cuando hace más sol, por ejemplo», comenta. El responsable de Sun Systems piensa que el volumen de la demanda se mantendrá durante un tiempo más. «No soy analista, pero creo que habrá dos o tres años más a este nivel y después todo será más lineal», apunta Aduà.
Una de las dificultades del sector para absorber la demanda es la falta de profesionales cualificados. La Federación de Gremios de Instaladores de Cataluña (FEGICAT) apunta que en la provincia todavía faltan miles de trabajadores en el sector, aunque ha crecido el número de alumnos inscritos en el grado superior de Energías Renovables del Instituto Pere Martell. Precisamente, Sun Systems incorporará pronto a dos estudiantes en prácticas del centro. «Cada vez hay más personal cualificado», expresa Aduà.
Al mismo tiempo, el mismo Aduà señala que la empresa ha tenido que ampliar su departamento de ingeniería para participar en concursos públicos, ya que la administración pública también está invirtiendo en energías renovables. «Cada día salen licitaciones nuevas para instalar placas en edificios municipales», pone de relieve. Y añade: «Tenemos que hacer seguimiento y presentar todo de manera muy cuidadosa».
Por su parte, el Ayuntamiento de Tarragona prevé colocar paneles solares en varios edificios municipales en unos meses, como el cuartel de la Guardia Urbana o algunos módulos de la Tabacalera. Recientemente, Sun Systems ha sido la encargada de colocar placas fotovoltaicas en el centro cívico de Campclar, a cargo de la Generalitat.