ERC defiende que el plan para frenar las inundaciones en la Part Baixa ya «estaba en marcha»

El grupo municipal de Esquerra Republicana ha salido al paso de unas declaraciones que hizo el alcalde Rubén Viñuales durante el anuncio de las nuevas medidas para acabar con las inundaciones en la Part Baixa. «Es nuestra voluntad política dar prioridad a estas inversiones, por eso lo podemos hacer nosotros y no anteriores equipos de gobierno», afirmaba el alcalde. El consejero republicano y todavía presidente de Ematsa, Jordi Fortuny, molesto por esta afirmación, cargó ayer contra el alcalde: «Estas declaraciones en las cuales dice que había falta de voluntad política de solucionar este problema son completamente falsas y es un intento de enredar y engañar a los vecinos».

Desde Esquerra defienden que el proyecto presentado por Viñuales «viene de lejos». «La voluntad política estaba porque todo estaba y está en marcha», expresaba Fortuny, quien detallaba que Ematsa tiene tres actuaciones planificadas, aparte de la creación de los colectores en la calle Torres Jordi y en la calle Real. Además, el consejero apuntó que, realmente, es «un único colector» que se hará en dos fases. El edil explicaba que, el 17 de noviembre del 2022, ya se presentó en el Consejo de Administración cuál era el plan de actuación para las inundaciones de la Part Baixa y «una planificación, que iba del 2023 al 2026».

Fortuny explicó que, actualmente, ya se han iniciado los trabajos para el arreglo del túnel de desagüe que desviaría las aguas pluviales de la Part Alta por debajo del vial Bryant. Por otra parte, más de cara al 2024 o 2025, se ampliará la galería de la Estación de Bombardeo de Aguas Residuales y Pluviales (EBAR) de la calle Barcelona. «Está programado hacerlo con recursos de la Agencia Catalana del Agua (ACA), que está haciendo los trámites con Adif», ya que está bajo las vías de tren. También se ha planificado otra acción, «fundamentada con un PERTE», que desviaría el agua que llega a la Rambla Nova por la avenida de Ramón y Cajal. «Todo eso hará que no llegue tanta agua de la Part Alta a la Part Baixa», indicaba el consejero de ERC.

«Oportunismo político»

Estas acciones, junto con la creación de los nuevos colectores, tendrían que generar un sistema «capaz de evacuar 10.000 metros por segundo». Fortuny aseguraba también que el anterior gobierno ya se reunió con los vecinos para que conocieran este plan. «Es evidente que hay un oportunismo político para atribuirse cosas que, realmente, vienen de una implementación larga», expresaba el edil, quien añadía que «las cosas son fáciles cuando te lo encuentras todo hecho, pero ha habido un trabajo ingente para poder llegar a eso».

Por otra parte, apunta que el proyecto ejecutivo del colector de la calle Torres Jordi «es imposible hacerlo en quince días» y que Ematsa ha estado trabajando desde hace meses. Es cierto que Viñuales, en su intervención del lunes, apuntó que el grupo municipal formaba parte del Consejo de Administración de Ematsa y aseguró que en los últimos meses habían hablado con los técnicos «para expresar nuestros anhelos y prioridades». «No nos molesta que se haga protagonista y líder de la acción porque, en el fondo, es un reconocimiento claro a un trabajo hecho por muchos técnicos durante mucho tiempo», concluía Fortuny.