Playa
Las empresas de alquiler de motos de agua de Tarragona afirman que cumplen la normativa
Los usuarios particulares, por su parte, atribuyen los problemas con los bañistas a su «desconocimiento de la existencia del carril náutico»
Las empresas de alquiler de motos acuáticas de las playas de Tarragona aseguran que cumplen «en todo momento» con la normativa marítima y el proceso de actuación de sus equipos en el mar, y afirman que son los usuarios particulares de estas embarcaciones los que causan los problemas con los nadadores de aguas abiertas. Todo eso, se erige en respuesta al Club de Tenis Tarragona, el Club de Vela Playa Larga, el Club Natación Tàrraco y la Asociación Aguas Abiertas l'Arrabassada-China, que critican que estas embarcaciones pasan mucho cerca de dondeentrenan a los nadadores, con el riesgo que eso comporta.
«Antes de que un cliente suba a una moto de agua, se le hace un pequeño cursillo con que se le indica lo que puede hacer y el que no, y las sanciones que eso comporta si no lo respetan», afirman desde la empresa See The Sea Jet Ski. Según el establecimiento, los clientes están supervisados en todo momento por un grupo de monitores, que se aseguran de que se cumple con las normas. «Los monitores estamos muy concienciados del peligro que supone no hacer un uso adecuado de estas embarcaciones, y por eso nos aseguramos que no haya ningún problema con los bañistas», explica Carlos, monitor de la empresa Maven Watersports.
Así pues, preguntados sobre dondesurge todo el problema, las empresas de alquiler culpan a los usuarios particulares de estas embarcaciones acuáticas de no respetar los espacios que les corresponde, y de llevar a cabo maniobras que provocan el riesgo con los nadadores. «Como la licencia de navegación se saca con cuatro horas, la gente se deja las motos los unos a los otros, sin saber realmente cómo funciona ni por donde pueden pasar. Eso comporta que muchas veces les vemos cerca de los nadadores, con el riesgo que eso comporta,» explica uno de los propietarios de una de las nuevas empresas de alquiler de motos ubicadas en el Puerto de Tarragona. Con el fin de poner remedio a esta problemática, las empresas de alquiler proponen que haya más presencia policial en la zona, de manera que se controle el acceso y circulación de las motos de agua de particulares en las playas de la ciudad, aunque admiten que «es complicado llevar a término un control marítimo igual en lo que se hace en el suelo, ya que la policía no acostumbra a tener tanto acceso».
La respuesta de los particulares
Por su parte, los usuarios que utilizan su moto de agua particular en el mar, atribuyen los malentendidos con los nadadores a «el desconocimiento» de estos de la existencia del carril náutico, que permite a las motos circular en un espacio delimitado próximo a la línea de boyas amarillas. «Muchos nadadores no saben que podemos conducir las motos de agua por el carril náutico, que está expresamente habilitado por embarcaciones acuáticas,» explica Mohamed Boussefdaouen, usuario desde hace más cuatro años de motos acuáticas en las playas de Tarragona y representante del Tàrraco Sea Club. Además, el miembro de la agrupación de aficionados de motos acuáticas culpa a los bañistas de nadar «siempre que pueden» lo más cerca posible de la boya que delimita su espacio, y que «más allá ya está por donde circulamos nosotros», concluye. Con el fin de tratar de solucionar este problema, desde Tàrraco Sea Club proponen una reunión con los clubs de nadadores de Tarragona, para «asentarnos a hablar, compartir opiniones y llegar a un acuerdo», explican.