Limpieza
El pleno del Ayuntamiento de Tarragona votará el próximo jueves el nuevo contrato de limpieza
El consistorio incluye siete cambios técnicos, entre los cuales se aumenta el precio base de la licitación en 931.000,48 euros al año
El Ayuntamiento de Tarragona votará en el pleno municipal del jueves de la próxima semana si aprueba o no el nuevo contrato de limpieza. El nuevo gobierno incluye modificaciones tanto técnicas como algunas propuestas vecinales (consultar recuadro), y confía en que el pliego de cláusulas sea ratificado la semana que viene por el resto de grupos municipales.
Una vez la votación esté aprobada, se sacará a licitación, y desde el Ayuntamiento se confía en que con las modificaciones planteadas, esta vez no quede desierta. Aun así, desde el gobierno municipal apuntan al hecho que la adjudicación de la nueva empresa de recogida de residuos, limpieza viaria, playas, solares y gestión de la desechería de la ciudad, no se concretará hasta el mes de abril o mayo del 2024.
«Los seis grupos municipales ya conocen la propuesta del Ayuntamiento sobre el nuevo contrato de limpieza. Tuvo una buena recepción, nos transmitieron sus ganas de que quede resuelto y de ponernos a trabajar, así que no tenemos ninguna duda que quedará aprobada», afirmó Sonia Orts, consejera de Limpieza del Ayuntamiento de Tarragona. El anuncio llega después de que el pasado mes de mayo, el Tribunal de Contratos admitiera dos recursos por defectos de forma en la publicación del segundo intento de licitación del contrato –ya quedó desierto durante el último trimestre del 2022.
Así pues, con la voluntad de que no vuelva a suceder, y siguiendo la obligatoriedad de publicar un estudio de costes más detallado, así como la corrección de alguna enmienda solicitada, desde el departamento de Limpieza del Ayuntamiento de Tarragona se han establecido 7 cambios con el objetivo «de favorecer la participación e incrementar el interés por parte de las empresas participantes», explicó Orts.
Estos cambios empiezan por un incremento del precio base de la licitación de 931.000,48 euros al año –con la suma de los lotes 1 y 2, se cifra en un total de 21.437.093,19 euros. También se incrementan los precios de inversión, a causa de la inflación. Resuelto adecuando el precio de máquinas, aumentando el interés aplicado a las inversiones –paso de un 2,5 a un 4,5%– y pasando el contrato de 9 a 10 años. Por su parte, el porcentaje de gastos generales pasa del 5 al 7%, ya que en esta segunda licitación se incluyen los costes de amortización, que no se contemplaban en la primera.
Asimismo, también se aplicará una bonificación a la empresa adjudicataria para alcanzar los objetivos de recogida selectiva, con un plus de 350.000 euros al año, a partir del primer año de contrato –antes era a partir del tercer año. Finalmente, también se propone incrementar de 10 a 20 años la amortización de las obras de la nave. Cuando acabe la vigencia del contrato, la idea es que se prorratee hasta conseguir su cumplimiento.
Mejora de las condiciones
Más allá de los aspectos técnicos, el nuevo contrato de la basura también incorpora mejoras de las condiciones laborales de los trabajadores de la empresa que resulte ser la adjudicataria. «Una manera que las empresas se interesen por el contrato es, sobre todo, respetando los derechos de los trabajadores y trabajadoras», apuntó Orts.
En este sentido, el consistorio apunta que se ha incorporado un plus más (un 2,43%), teniendo en cuenta la posibilidad de un 5% de absentismo y los pluses preexistentes del convenio. Además, cabe decir que la eliminación de los vehículos de hidrógeno supone un ahorro de 2 millones de euros, que en este caso, se utilizarían en una partida que permitiría contratar a 7 personas más a la plantilla. «Estamos hablando de un servicio público destinado a la ciudadanía. Por lo tanto, consideramos que lo más adecuado es tener los trabajadores en unas buenas condiciones de trabajo», dijo Orts. Además concretó que el objetivo es renovar toda la flota de material y maquinaria del equipo de limpieza de cara al 2025.