Playa
Nadadores y usuarios de motos de agua llegan a un acuerdo de convivencia en Tarragona
En una reunión que contó con la presencia de la Guardia Civil, acordaron «respetarse mutuamente el espacio» para evitar que haya accidentes
La agrupación de aficionados de motos acuáticas Tàrraco Sea Club y el Club de Vela Platja Llarga de Tarragona han llegado a un acuerdo verbal de respeto y convivencia en la playa. Ambas entidades se reunieron a principios de semana en la biblioteca del Real Club Nàutic del Port de Tarragona, acompañados también por la Guardia Civil, para hablar sobre los problemas de convivencia en el mar entre nadadores y los usuarios de estas embarcaciones, que se han visto agravados durante este verano a causa de la mayor presencia de los usuarios en la playa, y de la afluencia de más nadadores y bañistas por las altas temperaturas.
«Los nadadores de aguas abiertas y bañistas de Tarragona no quieren que estemos en la playa, lo que nos parece injusto. Tenemos que velar para que los dos colectivos podamos convivir, sin molestar ni hacernos daño los unos a los otros», empieza diciendo Mohamed Boussefdaouen, usuario desde hace más de cuatro años de motos acuáticas en las playas de Tarragona y representante del Tàrraco Sea Club en el encuentro.
Los nadadores de Tarragona denuncian el incivismo de las motos acuáticas en la playa
Por esta razón, desde la agrupación consideran «esencial» haber tenido esta reunión con una sección de nadadores de un club de la ciudad. «El encuentro fue muy productivo, ya que pusimos sobre la mesa todos los aspectos que los usuarios de motos de agua consideramos que los nadadores y bañistas hacen mal, y viceversa, lo que es fundamental para poder llegar a un acuerdo», añade.
En este sentido, Boussefdaouen explica que, desde el Club de Vela Platja Llarga, «desconocían muchas de las cosas que les explicamos, como que no podían traspasar la línea de boyas amarillas sin una boya reglamentaria, a fin de que los usuarios de motos de agua, que pasamos por fuera, les podamos ver y evitar así cualquier accidente», apunta. Sin embargo, Boussefdaouen admite que la desinformación «es mutua», y que la culpa no sólo recae en los nadadores. «También hay muchos usuarios que cogen motos de agua por primera vez y no saben por dónde tienen que pasar y lo que pueden hacer y lo que no. Es por eso que tenemos que concienciar a los usuarios que vigilen también. Hay trabajo por hacer todavía», afirma.
Más vigilancia policial
La reunión de principios de semana también contó con la presencia de la Guardia Civil, que se comprometió a aumentar el número de agentes en el litoral de Tarragona con el fin de detectar infracciones y evitar posibles accidentes entre nadadores y las motos de agua. «Desde el inicio del verano, hemos visto a más policía en la playa, lo que nos da seguridad. Se han comprometido a tener este tema muy en cuenta para lo que queda de verano sobre todo, ya que es cuando más gente va a la playa», concluye Boussefdaouen.
Durante la reunión, además, se pactó otro encuentro de cara a los próximos días, donde se prevé que representantes de las secciones deportivas de natación de aguas abiertas de Tarragona, como son el Club de Tennis Tarragona, el Club Natació Tàrraco y la Associació Aigües Obertes l'Arrabassada-Xina, se sienten con la agrupación de usuarios de motos de agua Tàrraco Sea Club, para tratar el tema de forma conjunta y llegar a un acuerdo definitivo de convivencia entre ambos colectivos en las playas de la ciudad de Tarragona.