La entrada de administrativos ayuda a reducir las listas de espera de las autoescuelas de Tarragona

Las listas de espera de las autoescuelas de la ciudad de Tarragona para llevar a cabo las pruebas del carnet de conducir se han reducido considerablemente este verano en comparación con los últimos meses del año pasado. Mientras a finales de 2022 los alumnos tenían que esperar hasta 3 o 4 meses para llevar a cabo el examen práctico, este verano no se superan los dos meses de demora. Esta mejora desde las autoescuelas tarraconenses se atribuye a la contratación de personal administrativo.

«El año pasado teníamos muchos problemas para encontrar operadores de oficina, hasta el punto que eran los mismos examinadores los que tenían que llevar a cabo gestiones burocráticas, y, por lo tanto, no podían hacer las pruebas prácticas a los alumnos. Eso desencadenó una situación donde las listas de espera aumentaron considerablemente hasta cinco o seis meses en el caso del examen práctico», dice Carlos Oliver, presidente de la Asociación de Autoescuelas de Tarragona. Estos últimos meses, en cambio, en la Dirección General de Tráfico (DGT) de Tarragona han entrado cinco operadores de oficina, un hecho que «ha permitido aliviar el volumen de trabajo de los examinadores, que al poder centrarse únicamente en su trabajo, están disponibles para hacer muchos más exámenes, y eso ha ayudado a regular mucho más la actividad», añade.

En Tarragona, a día de hoy, hay 12 examinadores para toda la provincia, los cuales actúan bajo el sistema CAPA, un algoritmo que permite ajustar y repartir la capacidad de examen de cada dirección provincial según sus necesidades. Actualmente, Tarragona funciona con un ciclo de 10 días para los exámenes prácticos, los cuales se llevan a cabo de lunes a viernes: cuatro días en Reus, dos en Tortosa y dos en Tarragona.

Una vez acaba el ciclo, vuelve a empezar. «Por lo tanto, el hecho de contar con un examinador más o menos, ya marca mucha diferencia, porque en el transcurso de los 10 días que dura el ciclo, cada examinador atiende a una media de 120 alumnos», detalla. De hecho, Oliver apunta que, de cara al próximo mes de septiembre, «entrarán dos o tres nuevos examinadores en Tarragona, lo que supone una muy buena noticia, ya que nos permitirá agilizar todo todavía más», concluye.

Falta de profesores

Con respecto a los profesores de las autoescuelas, las empresas afirman que buscar profesionales cualificados para sus centros, «es un problema recurrente». La DGT es la encargada de llevar a cabo las pruebas de nuevos profesores de autoescuela, una convocatoria que hace años que no se celebra, lo que hace que muchos centros no encuentren nuevos profesores cuando los necesitan.

«A pesar de contar actualmente con siete profesores, siempre que tenemos que buscar a un nuevo trabajador nos cuesta porque no encontramos», explica Andrea López Tejada, de la autoescuela Sabat de Tarragona. De hecho, en la última, del pasado mes de enero, se ofrecieron 3.000 plazas de profesor de autoescuela por toda España, «una cifra totalmente insuficiente para abastecer a todas las autoescuelas del país», concluye Melody Ibañez, administrativa de la autoescuela RACC de la ciudad. Por esta razón, las autoescuelas tarraconenses piden a la DGT más plazas para profesores.