Urbanismo
La renovación de la avenida de Andorra no incluirá carril bici, de momento
El Ayuntamiento quiere tener aprobado el PMUS antes de decidir si tiene que haber en esta calle, en Prat de la Riba y en Pere Martell
La consejeríade Urbanismo del Ayuntamiento lo tiene claro. Hasta que no esté aprobado el Plande Movilidad Urbana Sostenible (PMUS), no se instalarán nuevos carriles bici en el centro de la ciudad. Y es que este documento será el que marcará en qué lugareses adecuado y necesario que haya. Eso, implica que, algunos de los carriles bici que proyectó el anterior gobierno, de momento, no se hagan. Son los casos de la avenida de Andorra y de la avenida de Prat de la Riba, en el tramo entre la plaza de Ponent y la avenida de Ramón y Cajal. En ambos casos, está prevista la renovación del asfaltado. En un principio, las dos intervenciones incluían la incorporación de un carril bici. Los proyectos se han modificado y, por ahora, no lo tendrán.
«No estamos en contra de los carriles bici», asegura Nacho García, consejero de Urbanismo,quien apunta que «es un elemento muy importante para la movilidad de la ciudad y no los podemos dibujar por donde queremos». Por este motivo, defiende que «tiene que haber un Plande Movilidad Urbana Sostenible detrás que nos avale que por allí tiene que pasar un carril bici». El edil explica que el PMUS, que es competencia de la consejerade Movilidad, Sonia Orts, se está redactando y está en una fase avanzada. Hay que recordar que, a mediados de noviembre del 2022, el Ayuntamiento adjudicó a Aie Multicriteri-Mcrit la redacción del PMUS. En la licitación se estableció que el plazo de ejecución era de 12 meses. Una vez elaborado el documento, la intención es aprobarlo el más soltar posible.
Mientras tanto, no se incorporarán carriles bici a las calles donde hay prevista una mejora del asfaltado. Con respecto a la avenida de Andorra, García apunta que «la obra civil que se tenía que hacer para el carril bici la haremos igual, porque son rebajas». Por otra parte, apunta que la idea de crear un nuevo paso de peatones se mantiene. La intervención tendrá un coste de 195.000 euros. El edil indica que a finales de este año o principios del siguiente se enviará el proyecto de asfaltado a contratación. Todavía habrá que esperar unos meses más para el de la avenida de Prat de la Riba, que también incluye la eliminación del quiosco en desuso que se encuentra en la esquina con Ramón y Cajal y costará 92.600 euros. También está prevista la renovación del segundo tramo de Pere Martell, aunque el dibujo todavía no está hecho. El PMUS marcará también si allí habrá carril bici o no y si se mantiene lo que hay en el tramo entre la plaza Imperial Tàrraco y Ramón y Cajal.
Cuestión de pintura
«La incorporación de un carril bici es sólo una cuestión de pintura», apunta al consejerode Territori. «Si el PMUS nos dice que por estas calles tiene que haber porque tiene sentido, no tenemos ningún problema», añade. El edil explica que, por ahora, renovarán el asfaltado y asegura que tendrán capacidad para colocar un carril bici si es necesario, porque hay espacio suficiente: «Eliminar las líneas del aparcamiento para hacer un carril bici no comporta demasiados problemas». En este sentido, se quiere evitar tener que rehacer obra hecha», es decir, hacer un carril ciclable para, después, tener que sacarlo.
Así pues, la redistribución de la movilidad proyectada para el anterior gobierno en la avenida de Prat de la Riba, con la eliminación de uno de los tres carriles, y a la avenida de Andorra, dondese quería reducir de la anchura de los carriles para los vehículos, no está previsto que se ejecute. En esta vía también se quería eliminar la media actual. Habrá que ver qué plantea ahora el Ayuntamiento. García apunta que «hoy por hoy, repintaremos las marcas viales tal como están ahora».