Campuzano garantiza que el albergue de la Residencial será para familias y jóvenes

El consejerode Derechos Sociales de la Generalitat de Catalunya, Carles Campuzano, ha desvanecido cualquier duda sobre el uso que se le dará en la antigua Ciudad de Reposo y de Vacaciones. El equipamiento, cerrado des del 2011, será «un albergue para familias y jóvenes». El consejeroaprovechó su visita a Tarragona ayer para dilapidar los rumores que han surgido entre los vecinos de Levante sobre la posibilidad de que la Residencial acogiera un centro para menores no acompañados, una idea que despertó reticencia por parte de algunos residentes de la zona.

De hecho, el pasado mes de junio, el alcalde de Tarragona, Rubén Viñuales, aseguraba a Tarragona Ràdio que uno de los usos que planteaba la Generalitat en la propuesta que elaboraron para optar en los fondos europeos Next Generation era el de vivienda dotacional. Es decir, que se contemplaba la opción que la Residencial albergara un centro de menores. Campuzano, sin embargo, aseguraba, en la comparecencia ante los medios, que el Gobierno «en ningún momento teníamos previsto construir ninguna otra cosa que no fuera el albergue». El alcalde remarcaba la necesidad de hacer cambios en el Plan|Plano Especial de la Ciudad de Reposo y de Vacaciones para dejar claro que sólo tendrá un uso de ocio, que es lo que permite hacer un albergue familiar, y suprimir el de alojamiento dotacional.

Viñuales apuntaba que, así, se eliminará la posibilidad de que el equipamiento pueda convertirse en un centro de menores. Por otra parte, el alcalde explicaba que se volverán a reunir con los vecinos de Levante para explicar «de manera pedagógica», que se ha llegado a una «solución objetiva» para que la Residencial pase a tener el uso exclusivo de albergue familiar. Ayuntamiento y Generalitat seguirán negociando por si la Ciudad de Reposo puede acabar albergando otros equipamientos para el vecindario, como un centro cívico. «Tenemos que acabar de ver si nos cuadra a las dos partes y valorar la situación económica», indicaba Viñuales.

Estos últimos flecos se decidirán mientras se saca adelante el albergue. La redacción del proyecto se adjudicó marzo y el tiempo de ejecución marcado es de ocho meses. Les obras se licitarán y se realizarán el próximo año. Campuzano reconocía que van «justos» y que urge acelerar el proceso porque la actuación cuenta con 15 millones de euros de los fondos Next Generation y hace falta que el nuevo equipamiento esté listo antes del 31 de diciembre del 2025. El consejerodestacaba que será un «albergue del siglo XXI», que será «moderno, ecológico y el más potente» de la Red Nacional de Albergues Sociales en Cataluña (Xanascat). Además, remarca que el nuevo equipamiento «reforzará la apuesta de Tarragona como ciudad atractiva para los visitantes».

Que el gobierno haya dado su visto bueno al proyecto, ha encendido el grupo municipal de ERC. La portavoz republicana, Maria Roig, indica que «durante la campaña electoral, Viñuales aseguró que lo pararía». El edil critica el «cinismo» del alcalde, que «mintió rotundamente» a los vecinos explicando que habría un centro de menores a la Residencial, cuando el gobierno de Ricomà ya había acordado que el proyecto del albergue sería para turismo juvenil y familiar. «Incluso apoyó a plataformas xenófobas», afirma.

Combatir el sinhogarismo

La reunión entre Viñuales y Campuzano sirvió para trabajar otros retos compartidos por el Ayuntamiento y la Generalitat en Tarragona. En este sentido, el consejerode Derechos Sociales explicó que el Gobierno municipal ampliará la aportación económica que hace a la administración local a través del contrato programa para reforzar políticas de sinhogarismo en la ciudad. En los próximos días, el Ayuntamiento recibirá 93.000 euros, que se destinarán al alquiler de un inmueble de la calle del Mar, que se convertirá en un equipamiento para gente sin hogar. Campuzano también se comprometió a incrementar el apoyoal servicio de atención en la dependencia y crear más plazas en las residencias para reducir las listas de espera.