Sólo Junts y Vox aprueban los primeros 100 días de mandato del gobierno Viñuales

Uno de los deberes más importantes de la oposición es fiscalizar la acción del gobierno. En el Ayuntamiento de Tarragona, los grupos municipales han analizado con lupa los primeros 100 días de Rubén Viñuales como alcalde y han valorado el trabajo llevado a cabo por la nueva ejecutiva desde el día de la investidura. De los cinco partidos que forman la oposición en el consistorio tarraconense, sólo Junts per Catalunya y Vox han aprobado el gobierno con un 6 sobre 10. En la otra cara de la moneda están las formaciones que se han mostrado críticas y han suspendido el inicio de mandato de los socialistas: Esquerra Republicana (3), En Comú Podem (3,9) y el Partido Popular (4).

Tanto ERC como ECP han hecho énfasis en el hecho de que gran parte de las 100 medidas que el equipo de gobierno anunció que haría no se han hecho. La portavoz republicana, Maria Roig, definía como «decepcionantes» los primeros 100 días de la ejecutiva. La consejera aseguraba que un 76% de las acciones prometidas no se han llegado a cumplir. De las que se han llevado a cabo, afirmaba que un 9% son «del legado del anterior gobierno», como los colectores de Torres Jordi, y un 7% «son acciones que obviamente se tienen que hacer, mande quien mande», como reunirse con entidades o cuidar a las personas mayores.

Así, aseguran que sólo un 8% de las promesas impulsadas son ideadas por los socialistas, como el Pam a Pam. Roig asegura que algunas acciones sabían que no se podían cumplir. El consejero de ERC, Xavier Puig, también criticó que el gobierno prometió acelerar algunas «políticas prioritarias», las cuales están paradas. Es el caso del convenio de carreteras, que todavía no se ha firmado, o la elaboración del POUM, entre otros. Además, mostró su preocupación por la «falta de rumbo» de Viñuales, a quien pide que defina hacia dónde tiene que ir Tarragona en aspectos como la movilidad sostenible, sobre todo por lo que respecta a los carriles bici.

Jordi Collado, portavoz de los comunes, también cree que el gobierno necesita «una hoja de ruta». «Tienen que decidir si quieren ir hacia una mayoría progresista o ir hacia la derecha, que hoy es Junts y PP», decía el edil, quien aseguraba que el tiempo se agota, ya que en poco tiempo se tendrán que negociar los presupuestos. A diferencia de ERC, afirman que se han cumplido 39 de las 100 acciones. Eso sí, sigue siendo una cifra insuficiente: «En cualquier examen, sería un 3,9».

El consejero de ECP, Toni Carmona ponía como ejemplo cinco «no acciones» que demuestran «la incapacidad del gobierno en estos 100 días». El edil afirmaba que la museización de la Font dels Lleons era «un proyecto demasiado ambicioso e irreal». Además, criticaba que no habido ninguna novedad sobre la planificación de plantación de 3.000 árboles, el inicio del estudio de la Empresa Mixta Energética de Tarragona, el proyecto del Banco de España o la instalación de una guingeta en la Anella Mediterrània. Collado alertaba de que «este gobierno en minoría de Viñuales empieza a parecerse demasiado al de Ricomà».

En este sentido, la portavoz del PP, Maria Mercè Martorell, aseguraba que, en este inicio de mandato, «todo continúa prácticamente igual». La edil ponía énfasis en la necesidad de mejorar la limpieza y la seguridad ciudadana. Además, apuntaba que no se ha hecho «ni una reparación de los espacios públicos», para mejorar la imagen de la ciudad. Martorell también criticaba el acuerdo entre el Ayuntamiento y la Generalitat para convertir la Ciutat de Repòs en un albergue juvenil, ya que «se ha perdido la oportunidad de poner equipamientos para los vecinos».

Notas positivas

No todo el mundo ha sido tan duro con el equipo capitaneado por Viñuales, porque Vox y Junts han aprobado los primeros cien días del gobierno. Y es curioso que la formación de ultraderecha sea uno de los únicos grupos que valore positivamente la tarea de los socialistas, cuando el alcalde ha estado reiterando su animadversión hacia Vox. Eso sí, el portavoz del partido, Javier Gómez, indicaba que, ahora, «empieza la responsabilidad de verdad, sin excusas». El edil apuntaba que Tarragona precisa de muchas actuaciones y que dará apoyo a todas las medidas positivas para los tarraconenses «con independencia del partido que las impulse».

Por su parte, el portavoz de Junts, Jordi Sendra, afirmaba que «el alcalde tiene ganas de hacer muchas cosas y busca complicidades para tirarlas adelante». El consejero aseguraba que el gobierno «hace cosas que defendíamos nosotros como la playa para perros». También remarcaba el compromiso mostrado por Viñuales en la lucha contra las palomas o en la recuperación de la Oficina de Promoción del Catalán. Sendra, sin embargo, advierte que si el gobierno quiere el voto de Junts para aprobar los presupuestos del 2024, tendrá que incluir partidas para desarrollar proyectos que defendieron los soberanistas en campaña.