L'Escamot quiere reactivar y consolidar el proyecto En Bici Sin Edad en Tarragona

El proyecto En Bici Sin Edad llegó a Tarragona hace un año de la mano de la Cooperativa L'Escamot. Durante el pasado invierno, muchas personas mayores de la residencia Mare de Déu de la Mercè pudieron disfrutar de este programa, que les permitía pasear por la ciudad montados en un triciclo eléctrico conducido por voluntarios. Lamentablemente, el servicio se tuvo que detener en primavera porque el vehículo que utilizaban tenía una avería. Aunque la intención de la cooperativa era reanudar la iniciativa lo antes posible, no ha sido posible por el gran volumen de trabajo que ha tenido la agrupación en los últimos meses. «Lo tuvimos que dejar de lado, pero queremos reactivarlo y consolidarlo en la ciudad», afirma el coordinador del proyecto en Tarragona, Roger Vives. La idea es que se puedan reanudar los paseos en triciclo antes de acabar el año.

En Bici Sin Edad empezó a rodar en el 2016 en Barcelona y se ha ido extendiendo a otros municipios como Granollers o Terrassa. El año pasado, L'Escamot hizo una prueba piloto en Tarragona, que se fue alargando por su buen funcionamiento. «Dábamos 10 u 11 paseos al mes», apunta Vives, quien asegura que la vuelta por parte de los usuarios y de los trabajadores de la residencia Mercè siempre ha sido muy positivo. «Acababan siempre muy contentos cuando volvían del paseo y querían repetir», explica el socio cofundador de L'Escamot. En este sentido, destaca que este servicio «les daba vida e ilusión, así como ganas de salir a la calle y de charlar con compañeros de la actividad que habían hecho».

Esta experiencia también era muy positiva para la quincena de voluntarios que participaban en el proyecto: «Es satisfactorio saber que estás ayudando a alguien y, además, vives momentos de paz y tranquilidad mientras hablas con las personas mayores». Aunque han estado parados durante los últimos meses, los voluntarios han mantenido el contacto con la esperanza de reanudar el proyecto algún día. Este invierno cogerán de nuevo el triciclo eléctrico para volver a acompañar a los usuarios de la residencia Mercè. Esta vez, sin embargo, la cooperativa también quiere llegar a la Fundación Topromi de la Canonja: «El proyecto está destinado a cualquier persona con problemas de movilidad».

Busca apoyo

Vives afirma que el principal objetivo es consolidar el programa Bici Sin Edad en la ciudad, para llegar a mucha más gente. Para hacerlo posible, sin embargo, hace falta «apoyo económico» para cubrir los gastos para mantener el servicio. «No queremos ganar dinero, sólo necesitamos una ayuda económica por si, por ejemplo, hay alguna avería», apunta el coordinador del proyecto. También podría permitir ampliar la flota de triciclos eléctricos, que rondan «entre los 7.000 y 10.000 euros». De esta manera, podrían tener «tres o cuatro repartidos por residencias de personas mayores o en centros cívicos». Así, esperan que el Ayuntamiento, con quien ya lo intentaron sin éxito, algún otro organismo público o alguna empresa privada ofrezcan su apoyo.