El ministro de Agricultura y Pesca, Lluis Planas, inaugura el Foro Empresarial de COCIEGA

El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación en funciones, Luis Planas, ha asegurado que «sin los jóvenes y las cooperativas» el sector agroalimentario «no tiene futuro». Lo dijo en la inauguración del Foro Empresarial de la Presidencia de la Confederación General de Cooperativas Agrarias de la Unión Europea (COGECA) que se celebró ayer en Tarragona, bajo el título Potenciando el futuro de la agricultura. La importancia de las cooperativas agroalimentarias para impulsar el relevo generacional .

Planas también defendió la importancia del relevo generacional, así como de la igualdad de género y la digitalización, entre otros aspectos, para revitalizar el mundo rural. Les jornadas, que finalizan hoy, reúnen más de 250 jóvenes agricultores y ganaderos procedentes de diferentes países europeos, los cuales reflexionarán sobre las acciones necesarias para garantizar el futuro del sector.

Para Planas, el futuro del sector agroalimentario pasa «necesariamente» por el relevo generacional y por el hecho de que las cooperativas españolas sean capaces de ganar en «dimensión y eficiencia», con el fin de competir en un mercado cada vez es «más global». «Eso supone innovación, transformación tecnológica, modernización del regadío, invertiremos 2.200 millones hasta el 2027, 140 de estos millones en Cataluña,» destacó. El ministro en funciones también señaló que, para fomentar el relevo generacional, es necesario que los jóvenes tengan una lava «justa y digna».

Por eso, subrayó que el gobierno español impulsó la modificación de la ley de la cadena alimenticia con el fin de mejorar la posición negociadora de los productores y evitar la venta a pérdidas, así como las prácticas desleales. El ministro en funciones se mostró convencido que el sistema agroalimentario ofrece muchas oportunidades de futuro a los jóvenes europeos, ya que se trata de un sector muy competitivo, que tiene vocación de vanguardia a la hora de incorporar innovaciones en sus procesos productivos, así como una gran vinculación con aspectos medioambientales y de estilo de vida saludable, y que, además, contribuye a la seguridad alimentaria mundial.

Al mismo tiempo, afirmó que las cooperativas agroalimentarias son «clave» para el desarrollo de las zonas rurales y un elemento «vertebrador» del territorio. Planas explicó que la superficie agraria útil y el sol «no se mantiene en sí mismo» y, que por esta razón, se tiene que preservar la «diversidad del paisaje y medio ambiente». «La actividad agraria tiene que ser sostenible, pero también rentable, si no hay rentabilidad, no hay sostenibilidad», remachó. Según datos del ministerio, las entidades cooperativas facturan más de 38.000 millones de euros en España. Eso equivale al 68% de la producción final agraria y al 28% de las ventas limpias de la industria alimentaria. Además, indican, su capacidad exportadora se ha incrementado en un 90% entre los años 2011 y el 2021. Y suponen, añaden, más del 14% de las exportaciones del conjunto del sector agroalimentario.

Capital del relevo generacional

Planas estuvo acompañado ayer de varias personalidades como Ángel Villafranca, presidente de Cooperativas Agroalimentarias de España o Rubén Viñuales, alcalde de Tarragona. En el encuentro, representantes de las cooperativas agrarias europeas han presentado sus experiencias y estrategias para responder a la «necesidad» de incorporar a más jóvenes agricultores y ganaderos a la actividad agraria y a los órganos de gobierno de las cooperativas. Así, el objetivo del congreso es promover el debate intergeneracional, poner las bases para trabajar para el relevo generacional y para determinar cuál es el papel que tienen que jugar las cooperativas. Les jornadas acabarán hoy con una visita de los participantes a la cooperativa Arroceros del Delta del Ebro, que tiene más de 150 años de historia y casi 2.000 socios dedicados al cultivo del arroz.