Política
Demostración de fuerza de Junts en el Camp de Tarragona
El partido ha reunido 150 afiliados a la asamblea de Veguería en Vila-seca
Más de 150 afiliados de Junts per Catalunya han llenado hasta los topes este lunes la sala Alcaldesa Josep Malapeira, del Auditorio Josep Carreras de Vila-seca, en la asamblea de la Veguería del Camp de Tarragona. Intervinieron el alcalde de Vila-seca y presidente del grupo de Junts a la Diputación de Tarragona, Pere Segura; el presidente de Junts en la Veguería del Camp de Tarragona y diputado en el Parlament de Catalunya, Quim Calatayud; el coordinador de la JNC en la Veguería, Arnau Llambrich; la senadora, cabeza de la oposición al Ayuntamiento de Reus y secretaria de Finanzas del partido, Teresa Pallarès; el portavoz adjunto del grupo parlamentario en el Congreso de los Diputados y diputado por Tarragona, Josep Maria Cruset; el presidente del grupo parlamentario en el Parlament de Catalunya, Albert Batet; la presidenta del partido, Laura Borràs, y la presidenta del Parlament de Catalunya, Anna Erra.
La asamblea, la primera desde el cierre del ciclo electoral que encadenó las municipales, del 28-M, y las españolas, del 23-J, sirvió para demostrar la fortaleza y solidez de la formación en el Camp de Tarragona, que a pesar de las adversidades y los intentos de otros para apartar Junts de las instituciones, tiene en estos momentos una fuerte presencia en los ayuntamientos, los consejos comarcales, y la Diputación de Tarragona, es la fuerza más activa y más propositiva en el Parlament de Catalunya, y tiene la clave de la gobernabilidad en el Estado español.
Los diversos cargos que intervinieron en la asamblea como los afiliados cerraron filas y se conjuraron en trabajar en los próximos meses, por ejemplo, con las jornadas municipalistas que se harán próximamente en cada comarca de la Veguería, para reforzar el partido, mejorar la implantación y consolidarlo como alternativa de gobierno para ganar las próximas elecciones europeas del 9-J del 2024 y las elecciones en el Parlament de Catalunya. Todo junto con el objetivo de volver a gobernar el país como palo de pajar del independentismo y partido con una clara vocación de mayoría y de centralidad, «lo que mejor puede servir a los ciudadanos».
Albert Batet afirmó que «en el Camp de Tarragona estamos fuertes y plantaremos batalla. Si tenemos fuerza es porque hemos mantenido la posición y lo hemos hecho en solitario. Los que han intentado destruirnos tendrán un disgusto grande. Es cierto que no estamos en el gobierno de la Diputación pero tenemos el hombre que tiene la clave de los presupuestos del Estado», en referencia a Josep Maria Cruset, dado que el diputado en el Congreso forma parte de la comisión de Presupuestos como representante del partido que tiene la clave|llave de la gobernabilidad. Batet también señaló que el país se tiene que preparar para dar un gran salto adelante cuando Puigdemont vuelva del exilio, que equiparó a los retornos, en su momento, de los presidentes Macià y Tarradellas.
La presidenta de Junts, Laura Borràs, apuntó que «es la hora del resarcimiento de todos estos años de adversidades» mientras que la presidenta del Parlament, Anna Erra, cerró la asamblea apelante a los alcaldes, concejales y afiliados de Junts a tener confianza en sí mismos y a trabajar con perseverancia: «si molestamos es porque somos referentes; somos protagonistas porque tenemos proyecto, porque somos los que ponemos el país por delante de todo». Y defendió la posición de fuerza del partido después del acuerdo con el PSOE que ha hecho que, por primera vez, se haya conseguido abrir un proceso de negociación con el Estado en el cual la parte española reconoce el conflicto nacional entre Cataluña y España y acepta mediación internacional.