El personal de Correos de Tarragona y Reus, saturado frente al exceso de paquetes a repartir
La acumulación produce que cartas certificadas no lleguen a tiempo a sus destinatarios
«Estamos trabajando bajo mínimos». Con esta afirmación, Albert Sabaté, trabajador de la Unidad de Reparto (UR) de Correos de Tarragona y portavoz del sindicato CGT, describe la precaria situación de los repartidores en la ciudad. La acumulación de productos provoca que cartas como citas judiciales o visitas médicas no lleguen a tiempo a sus destinatarios.
Sabaté denuncia que la dirección les obligue a priorizar la paquetería de empresas externas como Amazon, lo que potencia la acumulación de stock. Esta situación también se está viviendo desde otra UR, ubicada en Reus. Rubén Masmano, también portavoz de CGT, explica que la decisión de priorizar paquetería externa procede del deseo de Correos de «privatizarse y entrar en competencia con otras empresas de repartos». Masmano afirma que esto no debería permitirse, ya que «somos una empresa pública, y tenemos entregas más importantes que un paquete con una camiseta». Respecto a esto, Sabaté declara que «nos están haciendo competir con empresas como Seur o Amazon, donde los trabajadores laboran 12 horas diarias».
Ambos delegados plantean el segundo problema en esta ecuación: la falta de personal. Masmano se centra en la presión para repartirlo todo en un día: «Al final lo que hacemos es trabajar mal, no respetamos las normas de circulación porque si no no podemos asumir el volumen de trabajo». Mientras, Sabaté remarca que «un repartidor hace el trabajo de dos carteros», y que muchos empleados deben empezar antes y marcharse después del horario laboral marcado.
Por otra parte, el delegado de CGT en Reus también concreta que la empresa no cubre las vacantes de los trabajadores que están de baja o que han cogido vacaciones, algo que ocurrió en verano: «Ahora tenemos suerte porque no estamos al nivel de saturación de la campaña estival, pero porque, casualmente, no nos falta ningún compañero». Por su parte, Sabaté explica que en el Puente de diciembre estuvieron más saturados que ahora, pero que la previsión es que vuelvan a estar igual durante las fechas de Reyes.
Hasta ahora, la solución de la empresa para cubrir la falta de personal ha sido ofrecer horas extras remuneradas en fechas en las que los trabajadores tienen fiesta, como el 24 de diciembre.
Acciones sindicales
Masmano relata que llevan cinco años realizando huelgas y concentraciones para pedir mejoras laborales, y que no pararán hasta conseguirlas. Por otra parte, Sabaté esperará a las elecciones sindicales del próximo mes para que CGT obtenga más fuerza en el comité de empresa y, así, «frenar la escalada de privatización».