El Ayuntamiento de Tarragona dedicará más de 24 MEUR a enjugar deuda y pagar intereses este 2024
Hay que sumar el remanente, que también se usará para amortizar préstamos
El Ayuntamiento de Tarragona pagará 3,8 millones de euros para sufragar intereses de créditos bancarios, 1,7 más que el año pasado.
El Ayuntamiento de Tarragona ha previsto 188 millones de euros de gasto corriente para este 2024. Del total, un 9% corresponde a los pagos que efectuará el consistorio a las entidades financieras. Es decir, casi 17 millones de euros. De estos, 13,1 millones servirán para amortizar 14 préstamos que el consistorio tiene concertados desde hace años. Los otros 3,8 millones se destinarán a sufragar intereses de diferentes créditos. Aparte, el gobierno municipal ya comunicó que 6,7 de los 9 millones que calcula recibir a través de la Participación en los Ingresos del Estado (PIE) también servirán para secar deuda. Así, durante este año, Tarragona pagará, como mínimo, 23,6 millones de euros a los bancos.
Pendientes del remanente
Esta cifra, sin embargo, acabará siendo superior. El día que la consejera de Economía y Hacienda, Isabel Mascaró, presentó el presupuesto, se anunció que el dinero del remanente de tesorería se utilizará para amortizar deuda. El sobrante no se dará a conocer hasta la liquidación del ejercicio del 2023, que llegaría en la primavera.
De momento, lo que es seguro es que 13,1 millones de euros del presupuesto de este año servirán para reducir la deuda viva. Es una cantidad inferior a la del año pasado, cuando se destinaron 14,7 millones para amortizar 19 préstamos. En las cuentas del 2023 también se preveía gastar 2,1 millones para pagar intereses. En cambio, este año se abonarán 3,8.
Hay que recordar que, el pasado mes de septiembre, el Banco Central Europeo (BCE) decidió subir 25 puntos básicos los tipos de interés, elevándoles hasta el 4,5%, el nivel más alto desde el 2021. Cuando se anunció que el Ayuntamiento tenía un déficit de, supuestamente, 14 millones de euros, el alcalde, Rubén Viñuales, atribuyó la delicada situación del Ayuntamiento a este aumento, así al del precio de la energía, de la inflación o de los sueldos de los funcionarios. Finalmente, con una subida importante de impuestos y una reducción de gasto considerable, se pudieron cuadrar las cuentas.
El presupuesto cuenta con 21 millones para inversiones, de los cuales 14 provienen de un crédito bancario. Sin embargo, este año se volverá a reducir el pasivo municipal, ya que se pagarán más de 20 millones a amortizar préstamos. El Ayuntamiento ha cerrado el año situando la deuda viva en el 78,3% y todo indica que este 2024 conseguirá bajarlo por debajo del límite legal del 75%. Este hito permitiría al consistorio concertar créditos en el futuro sin la necesidad de que la Generalitat de Cataluña avale las operaciones.