Les nuevas zonas reguladas generan apoyos y críticas entre los tarraconenses
Los vecinos de Tarragona 2 celebran la decisión, pero reprochan las formas
Les nuevas zonas reguladas de aparcamiento en Tarragona son uno de los temas más controvertidos en la ciudad en las últimas semanas. El miércoles pasado, se supo que el barrio de Tarragona 2 tendrá zonas verdes. Concretamente, un total de 353 nuevas plazas verdes, entre la avenida Josep M Casas de Muller y la calle Sant Eulogi, que entrarán en funcionamiento a partir de marzo.
«Hace tiempo que nos quejamos de la inundación que sufrimos de coches que no son del barrio», expone Julià Montoya, presidente de la Asociación de Vecinos Tarragona 2. «Con respecto a la vecindad saldremos beneficiados», apunta al presidente. Sin embargo, Montoya critica las «formas» del consistorio a la hora de activar estos trabajos. «La sorpresa es encontrárnoslo en los diarios, sin que el Ayuntamiento nos diga nada», sentencia al presidente.
Montoya también expone que han pedido al Ayuntamiento que los sábados por la tarde no se pague la zona verde. «Sabemos que es complicado, pero facilitaría la convivencia familiar porque mucha gente viene de fuera. Al final, el fin de semana saldrá más caro venir a Tarragona 2 que ir a hacer un menú», remacha el presidente.
Por otra parte, la calle de los Castellers de Tarragona, la calle Florenci Vives y el tramo entre la calle Castellers de Tarragona y la Avenida Catalunya pasarán de zona verde a zona azul. Un cambio que ha generado polémica porque se trata de una zona residencial. Desde la Asociación de Vecinos de la calle Monestir de Poblet y alrededores aseguran que no han recibido ningún aviso de los trabajos por parte del Ayuntamiento.
De verde a azul
«En Tarragona tenemos un alcalde aficionado a la pintura. Zona azul en zonas residenciales. Ni ton ni son, sólo recaudación pura y dura», comentaba un vecino de la zona a X. «Cuándo a principios de enero renové la tarjeta anual de residente, pagando todo el año por adelantado, no me comunicaron que las calles próximas a casa pasarían de zona verde a azul. Eso solamente tiene un nombre. Afán recaudatorio», añadía otro vecino, a X.
Hace unas semanas, la zona del Francolí también se pintó de verde. «Ya ha entrado en funcionamiento y se evidencia que la regulación no hacía falta. Ahora parece un barrio fantasma», expresa Jordi Miguel, presidente de la Asociación de Vecinos del Parque Francolí. La entidad se reunirá esta semana con el gobierno municipal para tratar la situación. En los entornos del Hospital Joan XXIII, el pasado jueves, día en que entraba en funcionamiento el sistema de pago, diversos de los nuevos parquímetros aparecieron con graves desperfectos en los paneles solares.
Les nuevas zonas reguladas no acabarán aquí. La Vall de l'Arrabassada también contará con nuevas zonas verdes, aunque todavía no han empezado los trabajos de pintura. La previsión del gobierno es que estén terminadas en las próximas semanas.