Urbanismo
Empieza la pacificación de las calles Sant Pere y Gravina en el barrio del Serrallo
Se han iniciado los trabajos previos y, en pocos días, entrará la maquinaria
El Ayuntamiento colocó ayer la señalización excepcional por obras en ambas calles.
La reurbanización y pacificación de las calles Sant Pere y Gravina en el Serrallo ya ha empezado. Esta semana se han iniciado los trabajos previos y, en los próximos días, está prevista la entrada de la maquinaria pesada para la ejecución de las obras. Ayer, operarios del Ayuntamiento de Tarragona hicieron tareas de señalización en la zona. Aparte, los técnicos municipales revisaron las redes aéreas de servicios, ya que el proyecto de remodelación de las calles interiores del barrio marinero incluye la reordenación de las líneas telefónicas y eléctricas, que pasarán a ser soterradas.
El principal cambio que se vivirá en las calles Sant Pere y Gravina es que pasarán a ser de plataforma única. De esta manera, los peatones pasarán a ser los protagonistas y tendrán un uso preferente con respecto al tráfico motorizado, que verá cómo se reducirá la velocidad máxima a la que se podrá circular por estas vías. Para dar más seguridad a la gente que vaya a pie, las aceras pasarán a tener dos metros de anchura.
El plazo de ejecución será de cuatro meses. «La obra se ejecutará en paralelo en las dos calles para optimizar al máximo los recursos y, así, tener a punto la remodelación para el verano», apunta el consejero de Territorio, Nacho García. GICSA, la empresa encargada de la reurbanización, desarrollará el proyecto en dos fases de dos meses cada una. La primera comprende la remodelación de ambas calles entre la calle Pere Martell y la plaza de Sant Magí. Cuando se finalice este tramo, se continuará la reforma hasta la calle Sant Joan. El acceso a los parkings privados se verá afectada, pero se establecerán franjas horarias en función de cómo avancen los trabajos.
Como medida excepcional, el vecindario tendrá a su disposición un técnico que informará, gestionará y resolverá las incidencias y problemáticas que se puedan generar durante las obras. Igualmente, se facilitará a los residentes de la zona un teléfono y un correo que estará disponible las 24 horas del día. «Es un valor añadido a la obra, esta figura las irá actualizando mientras se vayan ejecutando los trabajos», asegura la consejera Montse Adan, concejala del barrio del Serrallo y Part Baixa, que el viernes se reunió con vecinos, restauradores y comerciantes de la zona en una asamblea abierta para resolver sus dudas.
Financiación europea
La pacificación de las calles Sant Pere y Gravina supondrán una inversión de 721.230 euros, que provienen de los 3,5 millones de euros que recibió el Ayuntamiento en el 2022 con su proyecto Tarragona entre Blau i Verd, a través de los fondos europeos Next Generation.