Incivismo
La EMT estudia cómo evitar robos de cable en los cargadores de coches eléctricos de Tarragona
De momento, se han producido dos en el de l'Arrabassada
Los ladrones han puesto en su punto de mira los cables de los puntos de carga públicos de vehículos eléctricos. Desde octubre del año pasado, el cargador que ha instalado en la calle de Salvador Espriu, en el barrio de la Vall de l'Arrabassada, ha sido objeto de dos robos. El último hurto se produjo en enero, cuando alguien cortó las mangueras que sirven para conectar el dispositivo con el coche para revender el cobre de su interior en el mercado negro.
Desde la Empresa Municipal de Transportes (EMT), explican que se han denunciado ambos incidentes a la Guardia Urbana y que «se está trabajando para reparar el punto de carga para que esté en funcionamiento tan pronto como sea posible». Por otra parte, afirman que se están estudiando medidas para que no se produzcan más robos: «Se implementará un nuevo sistema para que no sea tan fácil llevarse los cables».
Estas acciones vandálicas tienen graves repercusiones económicas para la empresa pública, ya que puede generar pérdidas de hasta 8.000 euros, dependiendo de la potencia del cargador, que puede quedar inutilizado durante semanas o meses. En el caso del de la Vall de l'Arrabassada, la EMT gastará 6.431,15 euros para arreglarlo.
Además, hay que sumar las horas de trabajo que comporta reparar las mangueras afectadas. Esta problemática no sólo se está viviendo en Tarragona, sino también en muchos otros municipios del país, donde los operadores han empezado a poner sistemas de alarmas y cámaras de videovigilancia para frenar la oleada de robos que están sufriendo.
Cinco cargadores en el exterior
La ciudad cuenta con cinco estaciones de carga de vehículos eléctricos en la vía pública. Hay dos de recarga rápida —120 kilómetros de autonomía en menos de 30 minutos— en la plaza Imperial Tàrraco y en la calle de Salvador Espriu de la Vall de l'Arrabassada. Las otras tres, ubicadas en la Anella Mediterrània, en la calle de Josep Maria Folch i Torres de les Gavarres y en la avenida de Vidal i Barraquer, son de tipo semirrápido —100 kilómetros en una hora.
Por otra parte, la EMT ofrece este servicio en los siete aparcamientos municipales cerrados que hay en la ciudad. Durante el 2022, se generaron 56 nuevos puntos de suministro eléctrico, que sumadas a las que ya existían en estos equipamientos hacen un total de 62 cargadores.