Patrimonio
La restauración del Pretorio de Tarragona se termina cinco meses antes de lo previsto
Los últimos trabajos dejan al descubierto una antigua arcada que apunta a la época medieval
La restauración de las fachadas de la torre del Pretorio de Tarragona se ha terminado cinco meses antes del previsto. La razón ha sido el incremento de recursos materiales y humanos que la empresa encargada de los trabajos ha puesto para acabar el trabajo antes de la llegada de los vencejos, una especie protegida que tiene nidos en la torre y que habría obligado a parar el trabajo.
De hecho, las obras ya empezaron más tarde de lo deseado precisamente porque las aves todavía no habían migrado. Así, han durado siete meses, nada de los doce previstos. La limpieza y consolidación de los menajes ha permitido dignificar el monumento y al mismo tiempo recuperar el color original de la piedra. Los últimos trabajos también han dejado al descubierto una antigua arcada que se estima que es medieval.
La intervención ha costado unos 662.000 euros. Primero se empezó por la fachada oeste, que da al mar y que era la que más patologías presentaba. Durante los trabajos aparecieron muchas marcas de picapedrero ocultas hasta ahora, algunas con significados desconocidos que diferentes expertos están estudiando. El gran andamio que se colocó permitió hacer un trabajo de inspección piedra en piedra y eso también permitió localizar más marcas de proyectiles de la guerra del Francés de las que había documentadas.
Posteriormente se ha intervenido en las fachadas norte y este, que toca en la plaza del Rey. En este caso el estado de la piedra era mejor, si bien también había elementos delicados. Un ejemplo son fragmentos de mortero de restauraciones de décadas pasadas que se habían llegado a desprender y caer a la calle, hecho que había generado situaciones de peligro para los peatones.
En la esquina entre las fachadas norte y este está donde ha aparecido precisamente el trozo de arcada, presumiblemente medieval. Ha sido a partir de retirar fragmentos de mortero y limpiar la piedra centímetro a centímetro. La arqueóloga municipal, Pilar Bravo, ha especificado que por los indicios que tienen «servía para comunicar el interior de la torre con otra torre que había anexa» y que desapareció durante la guerra del Francés, en 1813. De esta segunda torre tienen constancia por unos grabados de la época. «En un momento indeterminado que no sabemos, la comunicación se tapia y queda el trozo de arcada que ahora ha vuelto a salir a la luz», ha comentado.
El conseller de Patrimonio de la ciudad, Ignacio García, ha apuntado que la intervención que se ha hecho «ha permitido mejor la lectura del monumento y de sus fases históricas». De hecho, la torre del Pretorio tiene un origen romano, ya que servía de puerta de entrada del Foro Provincial, que después se reconvirtió en la época medieval y que incluso sirvió de prisión durante la Guerra Civil española.
Aparte de esta actuación, el monumento tendrá nuevas mejoras. La semana pasada salió a licitación la convocatoria para sacar adelante las obras para el proyecto de restauración y adecuación de la sala del sarcófago, que está cerrada a los visitantes ya que tiene problemas estructurales. El proyecto se prevé pueda empezar antes del verano y durará unos tres meses. Por otra parte, a finales del 2023 el ayuntamiento aprobó una partida de 120.000 euros para arreglar las escaleras de acceso desde la plaza del Rey, con el fin de asegurarlas. Finalmente, el consistorio está pendiente de saber si recibe una ayuda de los fondos Next Generation para la museización del espacio.