Piden más de 8.000 euros a los tres acusados de dañar la Torre de la Minerva de Tarragona

Fiscalia pide una multa de más de 8.000 euros a los tres acusados de dañar la Torre de la Minerva de Tarragona en julio de 2021. Los investigados son el jefe técnico de Patrimonio Histórico del Ayuntamiento de Tarragona y el gerente y el ingeniero de la empresa Bastides Foreseny, los cuales están acusados de un delito de daños al patrimonio histórico por imprudencia grave. En el escrito de acusación al que ha tenido acceso ACN, el ministerio público considera que el daño patrimonial ocasionado es «incalculable», pero solicita 5.000 euros de responsabilidad civil. El conjunto arqueológico es Patrimonio Mundial de la UNESCO. Los operarios perforaron la torre para colocar un andamio para restaurarla, haciendo doce agujeros, uno de ellos en el relieve de la diosa.

Según el escrito acusatorio, el 19 de abril de 2021 se reunieron representantes del Arzobispado de Tarragona– propietario de la Torre de la Minerva y del fragmento de la muralla romana- con otros responsables de las administraciones públicas, como la arqueóloga de los servicios territoriales del Departamento de Cultura, técnicos del Centro de Restauración de Bienes Muebles de Cataluña o el jefe técnico de Patrimonio Histórico del Ayuntamiento de Tarragona, Joan Menchón -uno de los tres acusados- para valorar el estado de la torre y, especialmente, el relieve de la diosa romana.

En la reunión multisectorial, se descartó el uso de una máquina elevadora porque por sus dimensiones no podía acceder. Así, se decidió que se usaría un andamio tubular – sin especificar de qué tipo- para examinar y analizar el estado de conservación de los restos romanos. El Ayuntamiento adjudicó la actuación de montaje de andamios a la empresa Bastides Foreseny por su «amplia experiencia» en monumentos históricos. Además, el ministerio público indica que el consistorio encargó la supervisión técnica del contrato a su jefe técnico de Patrimonio Histórico.

El fiscal explica que Menchón intercambió varios correos electrónicos con el gerente de Foreseny, Manuel Fernández, también investigado en la causa, en los cuales se solicitaba un presupuesto para un andamio, sin especificar las características de su estabilización. El jefe técnico de Patrimonio también incluyó en los correos un «croquis» de la ubicación e información para acceder al recinto. Finalmente, Fernández encargó la gestión de la actuación a su ingeniero, Cristian Fernández, el cual acompañó a los trabajadores a la Torre de la Minerva para que montaran la estructura.

«Los tres operarios no tenían ninguna calificación de tipo histórico o arqueológico. Una vez en el lugar, los dejó solos y durante el montaje del andamio no fueron objeto ni de una mínima supervisión por parte del jefe de los tres acusados, los cuales incumplieron gravemente la obligación elemental: asegurar la supervisión del montaje por personas conocedoras de la importancia del bien y de las prevenciones imprescindibles», argumenta el ministerio público.

12 agujeros

Los operarios instalaron el andamio clavando los anclajes «directamente» en la pared de la Torre de la Minerva. Perforaron doce agujeros en los sillares de la torre e introdujeron los tacos, uno de los cuales en el relieve. «Cada uno de los agujeros tenía 14 milímetros de diámetro y 100 de profundidad», recoge el escrito. Según el fiscal, la gravedad de los agujeros hechos «radica» en el hecho de que permiten el acceso del agua y, eso provoca que aparezcan microfisuras, grietas y la disgregación de las piedras. Al mismo tiempo, puede provocar, indica, la disposición de sedimentos terrosos y de aerosoles y que se instalen insectos, entre otros.

«En la reparación de urgencia se retiraron cinco de los doce tacos colocados, pero el que se introdujo en el relieve de la diosa no se consiguió sacar por la existencia de una fisura de dos centímetros», señala el ministerio público. Según el informe técnico, el daño patrimonial causado al conjunto monumental romano es «incalculable». Sin embargo, subraya que el coste de la reparación de urgencia subió a 1.580 euros. Este importe lo asumió la empresa Foreseny. Con respecto a los trabajos para repararlo definitivamente, se calcula que han costado 1.911,80 euros.

Primer texto en latín fuera de Roma

La construcción de la muralla romana de Tarragona se inició a principios del siglo III a.C. Además, en torno al año 208 a.C. se construyó la Torre de la Minerva, que tiene en su base el primer texto en latín fuera de Roma y varios grafitos en el alfabeto ibérico. También a la parte superior de la estructura hay un relieve de la diosa romana, que es el primer relieve romano fuera de la península Itálica.

La muralla está declarada Monumento Histórico Español (real orden de 24/3/1884, Gaceta 12/4/1884), forma parte del Conjunto Històric- Artístico de Tarragona (Decreto 652/1966, 10 de marzo, bien de interés cultural español), así como está declarado bien cultural de interés nacional de Cataluña y es Patrimonio Mundial de la UNESCO (Asamblea de Caims, 30/11/2000).

Más de 8.000 euros

Fiscalia considera que los hechos son constitutivos de un delito de daños al patrimonio histórico por imprudencia grave. Por eso, pide al gerente e ingeniero de Bastides Foreseny una multa de 8 meses con una cuota diaria de 12 euros. Por lo que, tendrán que pagar 2.880 euros. En el caso del jefe técnico de Patrimonio Histórico del Ayuntamiento de Tarragona, la multa sube hasta los 5.760 euros, ya que le reclama una sanción de 16 meses con una cuota también de 12 euros.

A la vez, el ministerio público pide que los tres acusados indemnicen conjunta y solidariamente, y si no subsidiariamente la empresa Foreseny y el Ayuntamiento de Tarragona, al Departamento de Cultura o bien a quién se haya hecho cargo de la actuación de reparación y restauración definitiva, que se determine en el juicio oral y en su sentencia. Además, tendrán que pagar 5.000 euros de responsabilidad civil, un importe que se tendrá que invertir «exclusivamente» en proyectos de conservación y restauración de la muralla romana de Tarragona.