Semana Santa
El Viacrucis de la Sang vuelve al recorrido original
Las calles de la Part Alta de Tarragona fueron ayer el escenario del recuerdo de los momentos de la vida de Jesús de Nazaret
La imatge va sortir de l’església de Natzaret cap al Portal de Sant Antoni.
El Viacrucis de la Sang recuperó ayer su itinerario original. Entre las murallas de la ciudad, centenares de fieles recordaron los momentos de la vida de Jesús. «El recorrido vuelve a pasar por la calle del Trinquet, como se hacía antiguamente», explicaba antes de empezar Josep Ciurana, organizador de la Congregación de la Puríssima Sang.
El interior de la Iglesia de Nazaret era un batiburrillo de fieles preparándose para el acontecimiento. ¿«De vuelta, el Santo Cristo lo dejamos delante del altar, no?», preguntaba un arreglador al organizador. «Estamos nerviosos. Hay mucho trabajo detrás que no se ve. Hace meses que arrengamos estos días», expresaba Ciurana. Dos días a la semana, los participantes asisten a cursos los meses previos para prepararse para la celebración. En la procesión participan una veintena de arregladores. «Es un día especial. Después de lo que hemos sufrido internamente, ver que los fieles se unen y trabajan para que todo salga bien es una gran satisfacción», decía Ramon Mullerat, subprefecto de la Sang. La organización ha ido un poco a contrarreloj, ya que normalmente las celebraciones se empiezan a preparar en octubre. «Hemos tenido que buscar gente, pero hemos llegado a todos los trámites a punto», apuntaba Ciurana. «La ilusión de los fieles es impresionante y hay un sentido de equipo y de cohesión muy importante», indicaba Mullerat.
Puntualmente, en la plaza del Rei empezó la oración y se hizo el silencio. Mientras la noche empezaba a oscurecer las calles, la imagen de Jesús avanzaba por el Portal de Sant Antoni, rememorando la primera de las 14 estaciones. «Ver a Jesús en el suelo nos indica que la caída forma parte del camino». Los arregladores hacían camino con el Cristo alzado, bien acompañados por cuatro niños diligentes que llevaban los soportes. «Cada vez más gente se ha ido sumando, hemos tenido mucho apoyo de las otras congregaciones. Ha sido sensacional. En momentos de crisis la gente se une más. Ha habido más artículos que nunca en la revista», decía Mullerat.
La imagen de Jesús retornó a la plaza del Rei acompañada del canto del Miserere por los fieles. «Crea en mí, oh Dios, un corazón limpio».