Nuevo capítulo en el contrato de la basura: denuncian el espionaje a la Jefa de Área de Limpieza Pública

La jefa del área de Limpieza Pública, encargada del contrato de la basura, ha denunciado que ha sufrido espionaje. Según adelantó ayer Porta Enrere y han confirmado fuentes municipales a Diari Més, la funcionaria habría sido víctima de seguimientos y tendría el teléfono intervenido. Además, el alcalde de la ciudad, Rubén Viñuales, también podría haber sido víctima del mismo delito.

Fuentes municipales aseguran que, en caso de confirmarse el espionaje al alcalde, presentarán una denuncia. El caso lo estaría llevando la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil, pero fuentes del cuerpo en Tarragona señalan que no hay ninguna investigación en marcha.

La odisea del contrato de la basura, el mayor de la historia del Ayuntamiento –232 millones de euros– continúa. La funcionaria del Ayuntamiento encargada del contrato de la limpieza ha denunciado haber sido víctima de seguimiento y espionaje. Según explica la noticia publicada por Porta Enrere, habría pruebas fotográficas y transcripciones de audio de encuentros y reuniones de la técnica con personas vinculadas al sector, así como con personal técnico del Ayuntamiento. Además, su móvil habría sido ‘infectado’ por un software de vigilancia.

Eso, sin embargo, no queda aquí. El alcalde de la ciudad, Rubén Viñuales, también sospecha que ha sido víctima de espionaje. Según explican fuentes municipales, el móvil del alcalde ha sido analizado para detectar si hay algún software instalado que pueda revelar información. En una primera prueba, el resultado fue positivo. «Estamos a la espera de realizar una segunda prueba. En caso de que esta sea también positiva, denunciaremos los hechos», dicen fuentes municipales.

Un contrato polémico

El caso de espionaje llega una semana después de que el Tribunal Catalán de Contratos tumbara la adjudicación del contrato de la limpieza del Ayuntamiento en GBI Paprec, la primera empresa clasificada en el concurso. Tanto Urbaser, la segunda clasificada, como FCC, la tercera y actual adjudicataria, habían presentado alegaciones a los resultados del concurso.

Días después, el gobierno municipal dijo que adjudicaría el contrato a la segunda clasificada, Urbaser, y un informe municipal lo ratificó. Todo, a pesar de las «deficiencias» que el Tribunal de Contratos había visto en el proyecto de todas las empresas. Este hecho levantó polvareda entre los grupos municipales: ERC y ECP posicionaron en contra, mientras que Junts y los concejales no adscritos, antes en VOX, decidieron dar apoyo al PSC. El alcalde de Tarragona, Rubén Viñuales, ya tendría pues los votos necesarios para sacar adelante la aprobación de la adjudicación del contrato de la basura. Los votos a favor de Junts y los no adscritos permitirían sacar adelante la propuesta del ejecutivo socialista en el próximo plenario del mes de julio.

Junta de Portavoces

Este miércoles, el alcalde de la ciudad ha convocado a una junta de portavoces con el fin de aclarar los hechos con los grupos municipales. «Nos parece preocupante, como mínimo, que sólo se plantee una denuncia en caso de que sea el alcalde quien ha sufrido espionaje. Es muy grave para todo el Ayuntamiento», subraya el portavoz de ECP, Jordi Collado. Por su parte, desde de ERC, consideran que «es necesario que se explique al resto de grupos por transparencia y que se haga con celeridad».

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