Seguridad
El barrio del Port tendrá más policía para afrontar la inseguridad en la zona
El Ayuntamiento también mejorará las cámaras de vigilancia, pero los vecinos no se fían
Se incrementa la presencia de agentes de la Guardia Urbana y se mejoran las cámaras de seguridad en el barrio del Port para intentar poner fin a la situación de inseguridad que se vive en la zona. Así lo han confirmado fuentes municipales a Diari Més y lo prometió el alcalde de Tarragona, Rubén Viñuales, en una reunión con un grupo de representantes de los vecinos del barrio que tuvo lugar el martes, con el objetivo de afrontar los problemas de inseguridad que estos denuncian hace años.
Durante la reunión, Viñuales dio respuesta a una de las demandas más destacadas: el aumento de la presencia policial de proximidad a pie para poner fin a incidentes que tienen lugar en la vía pública como es el caso de peleas, consumo y tráfico de drogas, robos y vandalismo entre otros.
No obstante, los vecinos consideran esta medida insuficiente. «Las patrullas son la punta del iceberg, queremos mucho más», afirmó Ismael, portavoz de la Comisión de Seguridad del barrio durante el encuentro vecinal que tuvo lugar ayer para informar a los residentes sobre los resultados de la reunión con el alcalde. «Tiene que aumentar el número de agentes, pero también necesitamos comunicación por parte del intendente con los vecinos del barrio para poder conocer el estado de la situación», añadió.
También lamentó la falta de concreción por parte del alcalde y el intendente Cabeza de la Guardia Urbana, presente también en la reunión. «No se nos ha especificado el número de agentes ni sus horarios. Con unas cuantas horas no es suficiente, los necesitamos las 24 horas», denunció.
Es por eso que la comisión también se hizo la petición de poder obtener estadísticas de carácter mensual sobre la actividad de la Guardia Urbana en la zona, para así «medir si se han realizado suficientes actuaciones en el barrio». Esta demanda, según afirman, fue aceptada por el intendente.
Demandas sin respuesta
Según indican los vecinos tanto el alcalde como el intendente no se mostraron receptivos ante la petición de instalar una pequeña comisaría de la Guardia Urbana en el patio del recinto ferial, que también actuara como centro de información turística, ya que consideran suficiente el incremento de presencia policial.
Otra demanda sin respuesta fue la de un nuevo local para la asociación de vecinos, ya que hace años que no disponen de uno, motivo por el cual reuniones como la de ayer o el pasado 18 de junio se tuvieron que realizar en las escaleras situadas al lado del Palacio de Congresos. Según indican los vecinos, el alcalde propuso un nuevo espacio con inversiones futuras, pero ninguna alternativa inmediata.
Tampoco se accedió a habilitar el uso de los ascensores del recinto ferial para superar el desnivel de la parte baja. En cambio, las escaleras mecánicas pasarán a funcionar durante las 24 horas del día. Otra queja común entre los vecinos es la alta concentración de bares en la zona y la presencia de dos locales de 24 horas, que aseguran, atrae personas conflictivas y provocan la falta de descanso nocturno a los residentes. No obstante, el alcalde les comunicó que mientras estos establecimientos cumplan los requisitos legales, no se podrá impedir su actividad.
Un mes de margen
A pesar de la desconfianza de los vecinos, estos esperan que las medidas establecidas tengan efecto sobre la situación de inseguridad, que se encuentra más grave que nunca después de que el pasado 9 de junio un comerciante del barrio sufriera una cuchillada en las costillas después de negarse a vender una bebida alcohólica y posteriormente fuera amenazado por el agresor después de que este quedara en libertad. La Comisión de Seguridad del barrio volverá a encontrarse con el alcalde y el intendente para valorar las medidas que se han puesto en práctica. Los vecinos prometieron seguir luchando y afirmaron que están dispuestos a «volver a salir a la calle» si no se solucionan sus problemas.
Te puede interesar
Tarragona
Los vecinos de la Parte Baja de Tarragona piden una comisaría en el patio del recinto ferial
Marta Omella