Crear nuevos parkings disuasivos o hacer la Rambla peatonal, propuestas ciudadanas para el POUM de Tarragona
Más de 500 personas contribuyeron en el proceso participativo del POUM con 4.250 aportaciones
El Ayuntamiento recibió varias peticiones para crear nuevos aparcamientos disuasivos en la ciudad, como lo que hay delante de la Tabacalera.
La aprobación inicial del nuevo Plan de Ordenación Urbanística Municipal (POUM) llegará a principios del 2025. Esta es la voluntad del gobierno municipal del Ayuntamiento de Tarragona, que ya está buscando los apoyos necesarios para sacarlo adelante. Para llegar hasta aquí, sin embargo, el consistorio ha tenido que recorrer un arduo camino que tuvo su inicio el año 2020, cuando el Tribunal Supremo tumbó el POUM del 2013. Desde entonces, se ha estado definiendo un nuevo plan para fijar el desarrollo urbanístico de la ciudad para los próximos años.
Para elaborar este documento, se ha escuchado la ciudadanía y se ha tenido en cuenta su opinión a través del proceso participativo, del cual se desprenden propuestas muy variadas como crear nuevas zonas de aparcamientos y parkings disuasivos en diferentes puntos de Tarragona, pacificar completamente la Rambla Nova, naturalizar el parque litoral de la Mora-Tamarit o, incluso, recuperar el Port Esportiu como área de ocio nocturno.
El proceso participativo consistió en encuestas y participaciones a través de la web del Ayuntamiento, talleres sectoriales dedicados a diferentes temáticas como el medio ambiente, la movilidad y la accesibilidad o el desarrollo económico. Todo se inició en noviembre del 2022, participaron un total de 571 personas y se recogieron un total de 4.250 aportaciones, de las cuales 2.192 propuestas. Hay que destacar que tomaron parte 93 entidades entre las que se incluyen asociaciones vecinales y colegios profesionales, centros educativos y asociaciones de familias, entre otros.
La movilidad ha sido uno de los bloques que más grado de interés y de consenso ha generado. Sobre todo con respecto al desvío de las mercancías por el interior y la consiguiente liberación del frente marítimo. Los tarraconenses también han hecho énfasis en la importancia del tranvía y de mejorar la conexión entre el centro y los barrios de Ponent y de la zona Norte.
En estos casos, el Ayuntamiento se encuentra alineado con la ciudadanía. Entre las propuestas hechas, sobre todo por parte de asociaciones vecinales, se encuentra la habilitación de nuevas zonas de aparcamientos y la creación de más parkings disuasivos, en pro de una movilidad sostenible. «Es necesario que se hagan en zonas en las cuales haya un acceso rápido al transporte público», apunta un usuario a través del portal web habilitada para publicar propuestas. Por ejemplo, se ha sugerido el terreno que hay entre el Instituto Sant Pere i Sant Pau y el centro cívico del barrio o el solar que hay delante de la Escuela Pax.
Ampliar la Anilla Verde
El futuro POUM contempla la ampliación de la Anilla Verde, que ha sido una petición recurrente por parte de las personas que colaborado en el proceso participativo. Muchos de ellos han pedido conservar el Horta Gran como zona agraria, y la creación de islas verdes en medio de la ciudad —cómo podría estar en la zona de Jardins Vapor- y de parques y espacios públicos de calidad.
El Ayuntamiento también ha recibido peticiones para hacer peatonal toda la Rambla Nova. El gobierno quiere pacificar la primera coca, pero parte de la ciudadanía pide ir un paso más allá y restringir el acceso a los vehículos de forma gradual.
El gobierno ya ha tenido en cuenta todas las peticiones a la hora de elaborar la primera propuesta del nuevo POUM. Ahora, negocia con la oposición para cerrar una versión definitiva.