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Ematsa impulsa un sistema que renueva el alcantarillado sin obra y en 48 horas
La nueva metodología se aplicará siempre que se pueda y ahorrará el 50% de los costes de las intervenciones
Ematsa lleva un año haciendo pruebas con este nuevo sistema de manguera más eficiente.
La Empresa Municipal mixta de Aguas de Tarragona (EMATSA) apuesta por un nuevo sistema para la renovación del alcantarillado de la ciudad. «Es un método de manguera increíble que permite renovar las alcantarillas de las vías en 48 horas máximo y sin tener que hacer obras», explicó Rubén Viñuales, presidente de la compañía municipal, en el acto de presentación del sistema.
La metodología es la siguiente: se hace un agujero en la calle por donde se introduce una manguera con material recubierto de resina que posteriormente se llena de aire. Entonces, un robot con luz ultravioleta endurece la resina y queda una textura dura. «Esto también permite que las cucarachas no puedan poner sus huevos, que son uno de los principales problemas en la red de la ciudad», indicó Viñuales. La durabilidad de estas estructuras es de 50 años, aunque hay estudios que indican que podrían llegar a los 100 años.
Este sistema proviene de Alemania y la compañía tarraconense es pionera a la hora de importarla al país. «Somos los primeros en hacer un gran despliegue. Ahora se ha licitado un proceso parecido en Palma de Mallorca y se han hecho experiencias en Madrid, Murcia y Alicante», expuso Daniel Milan, gerente de Ematsa. La empresa pública hace un año que ha ido cogiendo experiencia con la metodología y esta semana ha empezado el despliegue del sistema por toda la ciudad.
31 km en 8 años
«Nuestra intención es renovar 31 kilómetros de alcantarillado en los próximos ocho años», afirmó Milan. La inversión prevista para este periodo es de 16 millones de euros. Los primeros trabajos ya se están realizando en la calle Arquitecte Rovira y en Méndez Núñez. «En aquellos tramos donde la estructura del colector esté muy deteriorada y con la manguera no sea suficiente, se tendrá que hacer obra», explicó el gerente. Se calcula que serán tres o cuatro kilómetros.
Ahorro económico
Otra gran ventaja del nuevo sistema es el coste económico. «Se calcula que el ahorro es del 50% con respecto al sistema habitual hasta ahora», apuntó Viñuales. Además, este tipo de intervención no requiere informes arqueológicos previos. «Esto, para una ciudad como Tarragona, es muy interesante», añadió Viñuales.
Más allá, el presidente y alcalde recordó que el alcantarillado de la ciudad es «muy antiguo» y que «tenemos la vocación de renovar las zonas más críticas». Tal como adelantó el Diari Més, los estudios recientes del alcantarillado de Ematsa han evidenciado que decenas de kilómetros están en estado grave o muy grave. «Queremos tener una red eficiente», concluyó Viñuales.