Movilidad
De 856 a 263: las multas de la Guardia Urbana de Tarragona a patinetes eléctricos caen un 70% en tres años
No utilizar casco o aparcar el vehículo mal son las infracciones más habituales en la ciudad
La Guardia Urbana de Tarragona ha efectuado un total de 263 denuncias a patinetes eléctricos en el último año. Esta cifra supone un descenso de un 70% de sanciones con respecto al año 2021 en la ciudad, cuando se superaron las 850 multas, y se popularizó el uso de este medio de transporte.
En el último año, 83 de estas denuncias han sido por no utilizar el casco protector, las infracciones más frecuentes. En segundo lugar, las multas por estacionar el vehículo encima de la acera han sumado 61 sanciones de la Guardia Urbana. Si se compara con hace tres años, la misma infracción supuso 388 denuncias.
Por otra parte, las infracciones por circular por la acera o zona de peatones, en sentido contrario o prohibido o llevando a un pasajero han supuesto 64 sanciones. En el año 2021 sólo estas vulneraciones de la ley sumaron 278 multas. Más allá, ilegalidades como conducir bajo los efectos del alcohol, el exceso de velocidad o la utilización de los teléfonos móviles suman 16 sanciones.
Los datos reflejan cómo los tarraconenses hacen un mejor uso de este tipo de vehículos y conocen su regulación. Durante el 2022, la misma Guardia Urbana hizo una campaña en la calle para informar a los usuarios de los patinetes de su buen uso, sin sancionar infracciones, durante un periodo determinado.
En este sentido, el Consejo de Ministros trabaja en una ley que obligue a registrar los patinetes eléctricos y que tengan un seguro de accidentes. La velocidad máxima permitida para estos vehículos son los 25 km/h. Además, los patinetes tienen prohibida la circulación en vías interurbanas, autopistas, autovías o túneles urbanos. Las sanciones por conducir bajo los efectos del alcohol pueden ir de los 500 hasta el millar de euros. Si se utiliza el teléfono móvil, con auriculares o sin casco las sanciones son de 200 euros.